La interpretación de la canción de Sara González Su nombre es pueblo, donde se evoca a los héroes de las gestas libertadoras cubanas, a cargo de Annie Garcés, acompañada por un cuarteto de saxofones; un toque de silencio y el pase de lista de los caídos en combate, así como de los asesinados luego —en el que un grupo de pioneros respondieron ¡Presente! en las 61 oportunidades—, sirvieron de apertura, en la Plaza de la Patria de Bayamo, al acto nacional por el aniversario 66 de los asaltos a los cuarteles Moncada, de Santiago de Cuba, y Carlos Manuel de Céspedes, de la heroica ciudad sede de la celebración.
Luego Heydis González Verdecia, estudiante de la enseñanza primaria, destacó el privilegio que representa para los niños cubanos el asistir a un acto de esa índole, y resaltó el orgullo de poder opinar, como lo hacen, sobre la realidad de su Patria. También se enorgulleció de vivir en un país que defiende la sonrisa, la paz y la felicidad de sus niños. Heydis agradeció a las autoridades cubanas el hecho de poner el futuro de la nación en nombre de las nuevas generaciones.
Una joven estudiante de Licenciatura en Contabilidad y Finanzas habló del pasado capitalista que hundía al pueblo de Cuba en la desesperación y en la discriminación de diversa índole. Rechazó la aplicación reciente del Capítulo III de la Ley Helms Burton y dijo: “Desde la cuna de la nacionalidad cubana ratificamos nuestro eterno compromiso con el pueblo cubano y de tomar las armas si fuera necesario. Esta generación le dice al imperialismo: ‘No nos entendimos cuando el Zanjón y ahora tampoco nos entendemos”.
La conmemoración, a la que asiste también José Ramón Machado Ventura, segundo secretario del Comité Central del Partido, al igual que numerosos miembros del Buró Político y las autoridades de la provincia Granma, tiene lugar cuando se acaba de cumplir un centenario del natalicio de Carlos Manuel de Céspedes, insigne patriota y abogado que dio inicio a las luchas independentistas en Cuba, al liberar a sus esclavos en la finca Demajagua y convocarlos al combate por la liberación del yugo español.
Hace seis décadas y 6 años, un grupo de jóvenes revolucionarios, de extracción humilde en su gran mayoría, pusieron a un lado sus sueños y se dispusieron a dar un golpe a la tiranía de Fulgencio Batista en dos de sus principales fortalezas militares. El hecho fracasó, pero trazó el camino hacia las posteriores acciones hacia el definitivo triunfo de 1959.
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