Los miembros del Grupo de Puebla exigieron este domingo el respeto a la integridad física del presidente boliviano, Evo Morales, y los miembros de su Gobierno, tras calificar de inaceptable la violencia a la que ya muchos fueron sometidos.
En una contundente declaración, ese brazo encabezado por varios exmandatarios y personalidades políticas de 12 países, quienes clausuraron en Buenos Aires su segunda reunión, expresaron su solidaridad con Morales y sus funcionarios, quienes impulsaron políticas públicas de inclusión social, reducción de la pobreza y la desigualdad y de participación ciudadana.
Nos solidarizamos con el pueblo de Bolivia en estas horas de sufrimiento y reclamamos la continuidad del proceso electoral transparente y sin restricciones, subrayaron al tiempo que exigieron a los Órganos Internacionales de Derechos Humanos garantizar el esclarecimiento de los actos de violencia, el juicio y castigo a los responsables.
En su llamamiento, los integrantes del Grupo declararon que una vez más, la constitución y el Estado de derecho de Bolivia fueron violados interrumpiendo un mandato constitucional y los graves hechos ocurridos en los últimos días se intensificaron en ese país.
Fuerzas de la oposición desencadenaron movilizaciones políticas acompañadas de actos de violencia, humillación de autoridades democráticamente elegidas, invasión, saqueo y quema de casas, secuestro y amenazas de familiares para llevar a cabo un golpe de estado y forzar la renuncia del presidente Evo Morales, agregaron.
Asimismo, resaltaron que todas las iniciativas de diálogo y negociación ofrecidas por el Gobierno de Morales fueron rechazadas.
‘La oposición optó por la intransigencia, la radicalización y la ruptura democrática, abriendo un grave antecedente de un nuevo golpe de estado en la larga historia de interrupciones democráticas en el país’, enfatizaron.
El Grupo de Puebla remarcó que fueron particularmente graves los comportamientos ilegales e irresponsables de las fuerzas policiales y de las propias fuerzas armadas que acompañaron al golpe.
El documento fue rubricado por uno de los impulsores de este mecanismo de integración, el excandidato presidencial chileno Marco Enríquez-Ominami, el excanciller brasileño Celso Amorim, la diputada chilena Karol Cariola y la excandidata presidencial colombiana Clara López, entre otros.
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