El
Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel
Bermúdez, participó en la tarde de este lunes en la reunión de balance anual
del Ministerio de la
Agricultura, donde subrayó la necesidad de continuar
trabajando para alcanzar la soberanía alimentaria que permita una mayor
seguridad nacional.
Este es
uno de los ámbitos económicos en que la población espera más, consideró, porque
su desarrollo ayuda de manera inmediata a satisfacer la alimentación, que
constituye hoy una de las necesidades más crecientes.
Como en
otras reuniones de este tipo, Díaz-Canel abogó por una mayor sensibilidad de
los cuadros ante los problemas. A los directivos de la Agricultura, dijo, les
tiene que doler cuando una cosecha se está perdiendo, cuando un producto que le
podíamos haber dado a nuestro pueblo no le llega o cuando no se hacen las cosas
bien.
Se
refirió también a la investigación científica vinculada, por ejemplo, a la
obtención de semillas de calidad, un tema básico y definitorio para la
agricultura en el país. Una parte importante del éxito que se ha logrado en la
producción de arroz radica en el desarrollo de variedades cubanas.
Además,
acotó, no podemos dejar a un lado las potencialidades de la agricultura de
precisión, que permite ahorrar fertilizantes y plaguicidas; de la
agroecología,
que es más sana y responde al concepto de desarrollo sostenible; y del
extensionismo agrícola, innovación cubana por definición. Destacó la
preparación de los científicos de este sector que, pegados al surco, son
capaces de emprender grandes investigaciones.
El
Presidente comentó, asimismo, acerca de la necesidad de trabajar más las
tecnologías para la conservación de las producciones, sobre todo en los picos
de cosechas.
Definió
que las entidades agropecuarias tienen que establecer encadenamientos
productivos con la inversión extranjera, las exportaciones, la sustitución de
importaciones y todos los actores de la economía cubana.
El
Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros abogó por defender la
producción nacional de renglones imprescindibles como pollo, pienso animal,
maíz, carne de cerdo y de res. Indicó reanimar el programa porcino, tanto en el
sector estatal como en el privado, así como revisar el programa ganadero con
todos los elementos fundacionales que definió el Comandante en Jefe de la Revolución Cubana
Fidel Castro Ruz. A la par, dijo, tenemos que incentivar el desarrollo del
ganado menor, para mejorar los niveles de alimentación.
Se
refirió al perfeccionamiento del sistema de Acopio y al papel que esta entidad
tiene que desempeñar en la recogida de la mayor cantidad de producciones
posibles, para que sea el Estado quien las comercialice y puedan controlarse
los precios. Con ello, precisó, se evitan intermediarios y la especulación.
Díaz-Canel
abordó, entre otros asuntos, el programa de autoabastecimiento local que debe
incentivar la diversificación de la producción agropecuaria; el perfeccionamiento
del sistema de créditos para los productores; y las inversiones de la
agricultura vinculadas, sobre todo, a los sistemas de riego, porque es una de
las cuestiones que más impide avanzar.
Durante
el debate, el Segundo Secretario del Comité Central del Partido Comunista, José
Ramón Machado Ventura, señaló que los productores tienen que cambiar la
mentalidad con relación a la siembra destinada al alimento animal. Consideró
que el pienso que hoy importa el país es muy costoso, de ahí que deban
sembrarse plantas proteicas con ese destino.
En tanto,
el primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Salvador
Valdés Mesa, se refirió al respeto que debe caracterizar el pago a los
productores por sus cosechas, así como a la atención constante que estos deben
recibir de los cuadros del sistema de la Agricultura.
El titular del sector, Gustavo
Rodríguez Rollero, reflexionó sobre el programa de autoabastecimiento local
–donde juega un rol fundamental el movimiento de la Agricultura Urbana,
Suburbana y Familiar–, en el que se ha definido la entrega mensual de 30 libras de granos,
frutas y hortalizas per cápita. Para lograr esa meta, dijo, se necesitan 154
000 toneladas mensuales y en los últimos meses hemos llegado a 95 000. Como
estrategia es muy buena, pero tenemos que seguir sembrando y acopiando todo lo
que se pueda.
Los
directivos presentes en el encuentro abordaron asuntos como la relación
permanente de la ciencia con el campo; las inversiones que sustentan el
progreso de la agricultura; la informatización y automatización de los procesos
en el sector; y los fondos exportables como el café, el cacao, el carbón
vegetal, el tabaco y la miel, que cuentan con amplias potencialidades para su
desarrollo.
Insiste Díaz-Canel en trabajar por una mayor soberanía alimentaria
El Presidente afirmó que las entidades agropecuarias tienen que establecer encadenamientos productivos con la inversión extranjera, las exportaciones, la sustitución de importaciones y todos los actores de la economía cubana. (Foto: Estudios Revolución) El Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, participó en la tarde
Soy campesino y cito:»Como en otras reuniones de este tipo, Díaz-Canel abogó por una mayor sensibilidad de los cuadros ante los problemas. A los directivos de la Agricultura, dijo, les tiene que doler cuando una cosecha se está perdiendo, cuando un producto que le podíamos haber dado a nuestro pueblo no le llega o cuando no se hacen las cosas bien.»
En estos momentos tengo 3 hectáreas y medias de yuca en termino de cosecha la cual no va a tener producción alguna por falta de riego.Por no asignarme el combustible necesario.Tambien tengo dos hectáreas de zanahorias que se han enfermado por no contar con productos fitosanitarios.Tampoco se le aplicó fertilizante porque no había.Una producción contratada para el turismo,la cuál no sirve por darse chiquita y no tener calidad por no cumplir los parámetros establecidos.Asi no se puede seguir sembrando,sin insumos ni recursos para perder las cosechas y al final los perjudicados somos nosotros los campesinos porque ni los gastos recogemos y a quien nos duele es a nosotros y al pueblo que no recibe esos alimentos.