China y Estados Unidos sostendrán este jueves en Beijing la tercera ronda de las negociaciones encaminadas a terminar su guerra comercial, apremiados ahora porque están cerca de que expire el 1 de marzo la tregua al conflicto
Las nuevas pláticas deben extenderse hasta mañana, aunque en el primer turno se prorrogaron por un día más.
Desde que se reanudaron en ambas capitales, han transcurrido a puertas cerradas y todavía sin delinear en concreto el esperado convenio que zanje la disputa.
Los debates se han centraron en asuntos sensibles como la protección de los derechos de propiedad intelectual, la transferencia tecnológica y las tarifas.
Según la parte china, la ronda anterior fue fructífera, objetiva y arrojó la decisión de fortalecer la cooperación en mencionados aspectos, equilibrar la balanza comercial y dar respuesta a las preocupaciones mutuas en el aspecto económico.
El gigante asiático incrementará las importaciones de productos agrícolas, energéticos, manufacturados y servicios estadounidenses, como parte de su política de elevar la presencia de artículos de alta calidad para su población.
También creará un ambiente propicio para la competencia justa, algo que aseguró está a tono con sus planes de apertura y reforma.
Los equipos ahora deben apretar el paso hacia resoluciones satisfactorias para cada lado y la implementación de los consensos alcanzados por los presidentes Xi Jinping y Donald Trump en diciembre pasado.
En esa oportunidad, Xi se comprometió a solucionar las preocupaciones que genera la profundización de su política de reforma y apertura, mientras Trump aseguró que corregiría las inquietudes de Beijing en materia económica y comercial.
El eventual convenio debe sustentarse en el respeto, equidad y beneficio compartido, aparte de conllevar a levantar los gravámenes aplicados desde julio pasado y normalizar las relaciones de negocios.
La comunidad internacional sigue con mayor atención las conversaciones de esta semana porque cada vez queda menos tiempo para que dure la difícil tregua de 90 días pactada por Xi y Trump.
Se espera que fructifiquen en algo más tangible y eviten así volver a caer en el mismo círculo vicioso en el cual se esfumaron de un momento a otro los intentos anteriores por frenar la controversia.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.