Los gobiernos de Estados Unidos y Brasil firmaron el Acuerdo de Salvaguardas Tecnológicas (AST) para el uso de la base de lanzamientos aeroespaciales de Alcántara, en el norteño estado brasileño de Maranhão.
El alquiler de esa instalación, lugar privilegiado para el lanzamiento de satélites, fue tentado en el Gobierno de Fernando Henrique Cardoso (1995-2002), pero resultó rechazado por el Congreso Nacional de Brasil, por representar una amenaza a la soberanía del gigante país sudamericano.
Otras voces en Brasilia impungan nuevamente el suscrito convenio, al alegar que Alcántara representa el mejor lugar del mundo para colocar misiles y satélites en órbita, y Washington muestra mucho interés para utilizar la base con fines militares. Preocupa que la zona sea administrada por Estados Unidos.
El acuerdo fue firmado este lunes en Washington por los ministros brasileños Ernesto Araújo, de Relaciones Exteriores, y Marcos Pontes, de Ciencia, Tecnología, Información y Comunicaciones, y por el secretario asistente de la Oficina de Seguridad Internacional y No proliferación del Departamento norteamericano de Estado, Christopher Ford, durante el evento Brazil Day, organizado por empresarios en la Cámara de Comercio de Estados Unidos.
El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, quien comenzó este lunes una breve visita oficial a esta potencia norteña, participó en la ceremonia y rubricó el documento.
Para entrar en vigor, el acuerdo deberá ser ratificado por el Congreso Nacional de Brasil.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.