El Presidente cubano Miguel Díaz-Canel llega al parque St Stephen Green, en el centro histórico de Dublín. Brian Glynn, director de las Américas de la Cancillería irlandesa, es el guía y anfitrión que acompaña al presidente y la comitiva cubana.
El parque de 9 hectáreas, perteneció a la familia Guinness, quienes lo compraron a los propietarios originales, lo restauraron y entregaron a la Ciudad.
Justo frente a una de las entradas, se puede ver el edificio de la Cancillería. En sus inicios fue Palacio de un Obispo protestante construido en 1736. Comprado y ampliado por la propia familia Guinness en el siglo XIX, es ahora sede de Exteriores.
La familia Guinness, propietaria de la famosa cerveza y de casi todo aquí, cuenta Glynn.
El presidente cubano tiene un encuentro casual con una familia dublinesa. Una de las niñas, comenta que le encantaría ir a Cuba. Los padres dicen que seguramente las llevarán. La familia tiene dos niñas y un varón. «Bienvenido a Dublín», dice la madre en representación de la familia en la despedida del breve encuentro.
Díaz-Canel se despide de Glynn y le da la bienvenida Patrick Prendergast, rector de Trinity College, la Universidad más antigua e importante de Irlanda.
La biblioteca del campus, atesora más de 6 millones de libros. El libro de Kells, manuscrito con dibujos de monjes celtas del siglo IX, una de las joyas de la biblioteca que ahora recorre el Presidente cubano.
El Libro de Kells está aquí desde el siglo XVII. Se ha reconstruido cinco veces. Los pigmentos son locales. El rojo proviene de un insecto mediterráneo que aplastaban y también el morado, color asociado al rey. Para ellos Cristo era el Rey.
Irlanda es una Isla de Santos y de eruditos. El de Kells es un libro de eruditos para hablar de Santos. Es un libro sagrado para los celtas. En Inglaterra hay un libro similar.
Construida en 1732, en 1750 ya estaba llena la sala principal de la biblioteca.
Llena de bustos de hombres, porque durante muchos años las mujeres no podían estudiar en Trinity College. Hoy son más del 60 por ciento.
Siete universidades tiene Dublín y todas son públicas.
La embajadora Jones interviene por primera vez para comentar un documento histórico único, la Declaración de independencia de 1916. En sus páginas se habla por primera vez de la igualdad de género y los derechos de todas las creencias. Los firmantes de este documento fueron todos ejecutados. Su esposo es descendiente de uno de ellos.
Díaz-Canel firma el libro de visitas de la biblioteca de Trinity College.
Librería internacional frente a la Universidad. En oferta, «Relato de un náufrago» de Gabriel García Márquez. Cinco euros en español. Diez en inglés. Este es el libro cuyo borrador entregó el Gabo a Fidel, quien le hizo observaciones y aportes fundamentales, según contaba el autor.
Vitrales donados por la familia Guinnes. «Estuve sediento. Gracias por darme de beber» dice una inscripción.
Díaz-Canel firma el libro de visitas a pedido del Reverendo Doctor William Morton.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.