Rusia y Venezuela no son provincias de Estados Unidos (EE.UU.), por lo que carece del derecho de dictarles la forma en que deben de llevar sus relaciones, afirmó este jueves la vocera del Ministerio ruso de Asuntos Exteriores, María Zajárova.
La portavoz indicó que el gobierno del presidente de EE.UU., Donald Trump, tiene una actitud “arrogante” por querer dictar a dos Estados soberanos la manera en que deben de construir sus nexos bilaterales.
Zajárova precisó que especialistas rusos se encuentran en territorio venezolano en concordancia con el tratado firmado en 2001 de colaboración técnica-militar entre ambas naciones.
Trump recibió ayer miércoles a Fabiana Ríos, esposa del diputado opositor Juan Guaidó, quien se autoproclamó presidente venezolano interino, marco en el cual aseveró que “Rusia tiene que salir” del paìs suramericano y que “todas las opciones” están abiertas para conseguirlo.
El martes pasado, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, de China, Geng Shuang, hizo declaraciones similares a su colega rusa al manifestar que “América Latina no pertenece a ningún país y no es el patio trasero de nadie”, al criticar la política de intervención implementada por Washington en contra de Venezuela.
Zajárova confirmó que el Gobierno del presidente ruso Vladimir Putin continuará “brindando asistencia al Gobierno legítimo de este país (suramericano) para la estabilización de la situación política interna y solución de la crisis social y económica”.
Tremendo galletazo al orgullo estúpido del presidente Trump. China ya le dijo lo mismo. Pero él, empecinado como es, no oye consejos. Buenas declaraciones, con Rusia y China no se juega. Ni con Venezuela, ni con China.