La rama apícola espirituana ha logrado reponerse de las severas afectaciones que le provocaron en los dos últimos años el huracán Irma y la tormenta subtropical Alberto y, al cierre del primer semestre registra una producción de casi 360 toneladas de miel, nivel que supera en 87 toneladas lo planificado para ese período y representa un volumen no conseguido en igual etapa desde la década del 90 del siglo pasado.
Nelson Luján Pérez, director de la Unidad Empresarial de Base Apícola Sancti Spíritus, explicó a Escambray que, hasta ahora y sin estar exentos de obstáculos, “el resultado es una señal de recuperación con crecimientos productivos, además desde 1991 no se alcanzaban cifras significativas de miel en los meses de junio y julio”.
De acuerdo con la valoración del directivo, dicho despertar descansa en el buen comportamiento del clima y las floraciones, unido al manejo de las colmenas, “pero algo importante —añadió— ha sido también el crecimiento vertical de la colmena que es lo que permite hacerla productiva, porque mientras más cuerpos tiene la colmena más miel se le extrae y necesita, al menos, dos cuerpos y medio para poder castrarla”.
La provincia planificó entregar este año 725 toneladas de miel, cifra muy superior a lo conseguido en las dos campañas precedentes por el embate de los eventos naturales, de manera que, a juzgar por los resultados del primer semestre, existen buenas opciones de materializar el cumplimiento porque la mejor época para la apicultura se enmarca en el trimestre final al compás de las floraciones de la campañilla y el leñatero, por demás las que aportan la miel de más calidad.
Acotó la fuente que en la primera mitad del año fue determinante la trashumancia de unas 5 000 colmenas hacia la costa sur —de un parque total superior a las 14 000—, a fin de aprovechar la floración del mangle, traslado donde se incluyen las más de 950 dotaciones de Yaguajay, toda vez que prevalece la afectación de esa especie en el litoral norte.
“Estos resultados se han logrado con el sacrificio de los apicultores, sobre todo los de Yaguajay, que migraron otra vez este año hacia la costa sur y han trabajado durante meses en condiciones de campaña; cabe destacar también la buena calidad de la miel, incluida la obtenida en la costa, propensa a generar más humedad; pero todas están dentro de los parámetros estipulados para el mercado”.
La buena noticia de la recuperación productiva del rubro exportable, está acompañada de que por primera vez Sancti Spíritus aporta miel ecológica, con 15 toneladas hasta la fecha y posibilidades de acercarse a las 30 al cierre del año.
En la zona de Pitajones, en Trinidad, el territorio cuenta con 528 colmenas y un área certificada para tal fin; además, debe cumplir requerimientos como no tener agentes contaminantes por industrias o residuales, que sean mieles de una única floración y lograr un exquisito manejo de la dotación.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.