Nada resulta más ingenuo en el ámbito beisbolero que tratar de fijar una opinión concluyente. Ante ese mismo veredicto, hay quienes se alegran, y otros que no.
Cualquier equipo, más allá del rigor en su confección, no sobrevive a las interpretaciones de la prensa y los aficionados. En asuntos de pelota es virtualmente imposible poner de acuerdo a todos los cubanos.
Y así acontece ahora con el elenco que representará a Cuba en la Serie del Caribe, en Barquisimeto. Como en ocasiones anteriores, esta vez llegó también la polémica y salieron a relucir distintas opiniones.
Después de conocer la nómina definitiva de los Leñadores a la cita caribeña, nadie impugna su calidad como equipo, pero no faltan quienes cuestionan el alto número de refuerzos convocados. Consideran que eso desfigura la esencia misma del conjunto que se proclamó monarca nacional.
Algunos lamentan la ausencia de los tuneros Denis Peña, Rafael Viñales y Leonis Figueroa, quienes marcaron toda la ruta del elenco a lo largo de la temporada. Otros piensan en aquellos que aportaron a la causa tunera durante la segunda fase y en los play off, y tampoco hacen el grado a Barquisimeto; son los casos de Erlis Casanova y Yasiel Santoya.
Hoy pueden ser insuficientes todos los argumentos para convencer a quienes quedarán en casa. Hay algo innegable: este elenco recién conformado dispone de lo esencial para ganar, es todo un equipo Cuba. Y eso es quizá, al mismo tiempo, lo más criticado. Tal vez no sea necesario confeccionar el mejor plantel nacional para ir, digamos, a la Serie del Caribe.
Sin restarle un ápice de importancia al evento, a partir de ahora sería útil establecer de antemano una cantidad de refuerzos para competir en esas justas. La cifra de ocho o diez peloteros sería garantía suficiente para reforzar al campeón nacional.
Otro detalle a tener en cuenta. La experiencia indica que cuando se juntan los bateadores de mayor fuerza (Despaigne, Cepeda, Benítez, Vizcaíno, Ayala…), el equipo pierde eficacia en la velocidad y se le resta al llamado juego táctico, uno de los principales atributos del monarca Las Tunas.
Ojalá a la hora de hacer la alineación regular el director Pablo Civil tome en consideración cuánto le aportó a los triunfos de los Leñadores el desempeño de sus jugadores más rápidos: Quiala, Larduet y Yohnson.
Pero al margen de cualquier análisis, justo o no, lo primordial es tratar de aprovechar lo mejor de cada jugador para que los Leñadores reforzados puedan emular con aquel Pinar del Río que en 2014 se alzó con la corona en San Juan, Puerto Rico. Es decir, compartir la aventura y la suerte de los tuneros en Barquisimeto.
Yo me siento muy bien, ansioso de rendir al máximo para ayudar al objetivo de ganar la medalla de oro en Barquisimeto, dijo Jorge Alomá, justo antes de entrar al coloso del Cerro para la jornada de entrenamiento, que este jueves fue a puertas cerradas. Ese es el espíritu.
No considero njusto que se dejen peloteros como los mencionados en este trabajo para realizar un teem cuba a una serie del caribe, Viñales se hecho los arreos a cuesta y bien todo un mes para llevar a ese equipo a la 2da fase, Denis Peña le gano el play off a ciego de avila a base de bateo, al igual que erlys, santoya no excelente defensor y ya estaba en forma al terminar la final. Porque civil no dejo a su hijo que es mas malo que el 60% de los lanzadores cubanos. Civil traicino al pueblo de las tunas porque segun el nadie le impuso nada, lo escogio el. Eso no lo hace Anglada, Urquiola, Victor Mesa….Como tienes que aprender civil, no ,pienses en tus logros personales, piensa en los muchachos que te llevaron al titulo.
Ese no es el equipo de los Leñadores de las Tunas, es un remedo de no se que cosa, el equipo que los tuneros seguimos y apluadimos se quedó en nuestros corazones, ese no es el que va a Barquisimeto.
olvidense de la serie del caribe ya no va a ser en venezuela