Trump regresó a la Casa Blanca tras otra polémica incursión internacional

El presidente estadounidense, Donald Trump, regresó a Washington tras participar en la Cumbre del G-7 en Francia, donde discutió sobre comercio, se saltó un encuentro acerca del clima y criticó a la prensa.

La cuestión comercial fue el centro de los encuentros bilaterales que el jefe de la Casa Blanca sostuvo en la ciudad gala de Biarritz en el contexto de la cita de tres días con líderes como los primeros ministros de Reino Unido, Boris Johnson; y Japón, Shinzo Abe; y el presidente anfitrión, Emmanuel Macron.

Además de abordar temas específicos relacionados con los vínculos bilaterales con esos países, el presidente norteamericano hizo referencia a la guerra comercial de su país con China, la cual profundizó el viernes, justo antes de partir hacia Francia, con el anuncio de una nueva subida de tarifas al gigante asiático.

Trump dio señales contradictorias este domingo acerca de su política arancelaria, al decir primero que tenía dudas sobre ese nuevo incremento, para que luego la mansión ejecutiva indicara que el mandatario en realidad lamentó no haber subido los gravámenes aún más.

Preguntado este lunes durante una conferencia de prensa si estaba listo para alcanzar el acuerdo comercial que Washington y Beijing han estado discutiendo, el gobernante respondió que solo si es un trato justo y bueno para Estados Unidos.

En la mencionada conferencia de prensa, ofrecida de forma conjunta con Macron, el mandatario galo sostuvo que están creadas las condiciones para un encuentro entre Trump y el presidente de Irán, Hassan Rohani, contra cuyo país el norteamericano ha desplegado una fuerte campaña que incluye sanciones unilaterales.

Las discusiones sobre Irán estuvieron entre las prioridades de la cumbre del G-7, a la cual se llegó con marcadas diferencias internas, pues mientras Trump abandonó el año pasado el pacto nuclear con Teherán y desató diversos castigos económicos, Francia, Alemania y Reino Unido continúan como defensores del pacto firmado en 2015.

Sin embargo, en la comparecencia de hoy, Macron cedió ante Washington, al considerar que su política hostil dio resultado ‘porque puso presión’ sobre Irán, y señalar que el acuerdo nuclear tiene deficiencias que deben superarse.

Ante la pregunta de si accedería a reunirse con Rohani, Trump dijo que si las circunstancias fueran correctas, ‘ciertamente estaría de acuerdo con eso’.

Pero, mientras tanto, tienen que ser buenos jugadores, añadió el jefe de Estado norteamericano, en lo que evidenció que las circunstancias correctas para él significan que Teherán ceda a las presiones estadounidenses.

En otro momento de ese encuentro final con la prensa, al ser cuestionado sobre su postura acerca de la crisis climática que enfrenta el orbe, Trump manifestó que quiere aire limpio y agua limpia, pero también desea que Estados Unidos conserve su ‘tremenda riqueza’.

Soy un ambientalista, mucha gente no entiende eso, expresó el gobernante, una frase que resultó muy criticada, más aún por pronunciarla después de faltar a una reunión entre los líderes del G-7 centrada en el clima, la biodiversidad y los océanos.

La Casa Blanca informó que Trump no estuvo presente en ese encuentro porque tenía programados diálogos bilaterales con Alemania y la India, pero según reportó la cadena de televisión CNN, la canciller federal germana, Angela Merkel, y el primer ministro indio, Narendra Modi, sí estuvieron en la cita sobre clima.

Esos y otros señalamientos de las organizaciones periodísticas sobre el desempeño del presidente en Francia y sus comentarios contradictorios quizás fueron la causa de que el gobernante acusara a los medios de una mala cobertura.

La pregunta que más me hicieron hoy mis colegas líderes mundiales fue ‘presidente, ¿por qué los medios estadounidenses odian tanto a su país? ¿Por qué están buscando que falle?’, escribió ayer en Twitter.

En otro momento de su estancia en Francia señaló en esa red social: ‘Los medios están destruyendo la prensa libre’, lo cual repite su práctica de atacar a las organizaciones periodísticas cuando no reflejan una imagen positiva de su labor.