El presidente Nicolás Maduro precisó que el sistema de distribución de alimentos tiene dos enemigos »el gobierno de Estados Unidos y la oligarquía golpista venezolana».
Desde uno de los principales almacenes de empaquetado y articulación de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP) en el estado de Vargas, el jefe de Estado reiteró que la administración de Donald Trump pretende ‘detener, sabotear, parar y bloquear la importación de insumos alimenticios, a fin de asfixiar la estabilidad del pueblo’.
Maduro recalcó que los CLAP integran un sistema de distribución directa único en el mundo, basado en la organización de la comunidad, la cual atiende actualmente seis millones de hogares en el país sudamericano.
‘Tenemos que fortalecer todos los mecanismos de entrega de alimentos para asegurarle a nuestro población recursos de calidad y a precios socialistas. Pido mayor esfuerzo, trabajo y resultados’, enfatizó el dignatario.
En su discurso, Maduro reiteró el llamado al Ejecutivo a realizar las gestiones necesarias para garantizar el abastecimiento de rubros alimenticios, y con ello contrarrestar los embates del bloqueo económico impuesto por Washington y sus aliados.
El presidente venezolano insistió en la necesidad de enfrentar la venta ilegal de los productos, la inflación de los precios y el robo, delitos que afectan a los consumidores.
En ese sentido, notificó que actualmente una caja CLAP, la cual contiene arroz, granos, pastas, aceite, entre otros rubros, tiene un costo legal de dos mil 500 bolívares (0,48 centavos de dólar).
Maduro comparó que la compra de ese conjunto de productos en el mercado regular tendrían un valor de 115 mil bolívares (22 dólares); y en el mercado especulativo 247 mil bolívares (47,5 dólares).
‘Si no fuera por el CLAP, millones de familias estuvieran en una crisis insostenible gracias a las sanciones de Estados Unidos’, sentenció.
Ante esa situación, el mandatario ordenó a los encargados de la Gran Misión Abastecimiento Soberano a avanzar en la consolidación del sistema alimentario del país ‘y buscar un florecimiento de la agroindustria para abastecer a la ciudadanía con producción nacional y disminuir las importaciones’.
Por otra parte, Maduro denunció la sanción impuesta por la Casa Blanca a 10 de las 12 navieras que trasladaban los alimentos a Venezuela, en su mayoría procedentes de México.
‘Como consecuencia de la medida de Washington, la llega de los rubros al país se retrasa, lo que llegaba en un mes, ahora tarda tres’, deploró el presidente venezolano.
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