Los 24 manifestantes antigolpistas detenidos hace más de un año durante la masacre de Senkata, en la vecina ciudad de El Alto, fueron liberados este viernes por orden judicial, aunque seguirán siendo procesados.
La presidenta de la agrupación de los detenidos, Marcela Calle, informó que la orden de libertad condicional fue dictada por el V Juzgado de Instrucción Penal.
El juez a cargo, indicó, determinó también que los liberados no cambien de domicilio y si lo hacen informen al juzgado y Calle aseveró que ninguno de los detenidos cometió delito alguno durante los luctuosos sucesos del 15 de noviembre de 2019.
Ese día, militares con blindados y policías dispararon a los manifestantes que protestaban contra el golpe que días antes impuso como presidenta de facto a Jeanine Áñez y que bloqueaban la planta de combustibles de Senkata, que abastece a La Paz y El Alto.
La dirigente señaló que se trataba de una manifestación pacífica y recordó que los uniformados dieron muerte a 11 civiles desarmados y demandó que cese el proceso en curso y se declare absueltos a los civiles, acusados falsamente de atacar a las tropas y de otros cargos.
Coincidentemente, también este viernes el presidente Luis Arce, en un discurso en la graduación de nuevos sargentos de las fuerzas armadas, dijo que matanzas como las cometidas bajo el gobierno de Áñez no deben repetirse nunca más y que los militares deben someterse al pueblo y no traicionar a los bolivianos, a la democracia ni al Estado.
La matanza de Senkata y la de Sacaba, en las afueras de la ciudad central de Cochabamba, es investigada por el Ministerio Público, que indaga a los promotores del golpe contra el gobierno de Evo Morales y a jefes militares de la época.
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