Un grupo de cinco especialistas espirituanos que se prepararon en el Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí (IPK), vinculados a los servicios médicos y a las terapias intensivas tanto del Hospital Pediátrico José Martí como del Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos, transmitieron este martes conferencias sobre la implementación aquí de los planes estratégicos del país ante el peligro del nuevo coronavirus SARS-CoV-2, causante de la enfermedad conocida como COVID-19.
En una segunda etapa de la preparación que tiene lugar en toda Cuba, dirigida a garantizar el dominio de los síntomas y características del padecimiento, así como de las medidas correctas para el manejo de las personas afectadas por el mismo, la información llegó a especialistas de hospitales de toda la provincia, con énfasis en las ramas de Medicina, Pediatría, Epidemiología y Laboratorio Clínico, quienes departieron con los doctores recién llegados del IPK sobre sus experiencias.
Asiel Alexander López Medina, especialista de primer grado en Medicina General Integral y en Higiene y Epidemiología, así como jefe del Programa Provincial de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) y Tuberculosis Pulmonar, sostuvo a la prensa que se trata de un virus emergente, del que no se conoce mucho, pero que en los peores casos podría ocasionar la muerte.
López Medina recomendó a la población extremar las medidas para evitar el contagio o la propagación de la enfermedad, si el virus hiciera su entrada al ámbito nacional. Ser oportunos y responsables y no deambular, sino acudir de inmediato al médico ante la aparición de síntomas como fiebre alta, tos y congestión o secreción nasal, son algunas de sus exhortaciones.
Mencionó también la necesidad del lavado frecuente y exhaustivo de las manos, al igual que evitar el contacto con pacientes que presenten manifestaciones de enfermedades respiratorias. También recomendó abstenerse de los saludos habituales como besos, abrazos o apretones de manos, en lugar de lo cual se sugiere, dijo, guardar una distancia prudencial de al menos un metro, sobre todo con personas afectadas por las mencionadas manifestaciones.
En relación con el uso de nasobucos, explicó que podrían ser de confección casera y preferiblemente de triple envoltura (tres capas de tela), pero solo ante la presencia en el hogar de pacientes sospechosos de COVID-19. No debe usarlos por más de tres horas y será preciso desecharlos si se contaminan, aunque pueden lavarse, amplió. Como medida cubana, dijo, se sugiere plancharlos a alta temperatura, pues, aunque no está demostrado que el virus muere en esas circunstancias, hay numerosos criterios que apuntan a ello.
El jefe del Programa Provincial de Infecciones Respiratorias Agudas (IRA) y Tuberculosis Pulmonar significó que, además de las acciones actuales, los propios especialistas han participado en la capacitación de personal vinculado a los servicios del Turismo (con énfasis en Trinidad), Educación y Transporte.
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