Una nueva brigada médica del contingente Henry Reeve, compuesta por 120 profesionales cubanos de la salud, parte este 5 de noviembre hacia Azerbaiyán para apoyar a ese país de la región del Cáucaso en el enfrentamiento a la pandemia de COVID-19.
Sus integrantes fueron despedidos en La Habana en sencillo acto que presidieron Marcia Cobas, viceministra de Salud Pública, y Santiago Badía González, secretario general del sindicato del ramo, quien aseveró que el grupo brindará en territorio azerí servicios de alta calidad, con la sensibilidad y valores que le caracterizan.
El doctor Rolando Montero, jefe de la brigada, afirmó que el ejército de batas blancas es digno heredero del legado de José Martí y Fidel Castro, y no está en venta, como no se puede comprar a Cuba y a su dignidad.
Refirió que mientras el gobierno de Estados Unidos desacredita la esencia humanista de la colaboración, los cubanos salvan vidas sin importar la procedencia social de sus pacientes.
La mayoría de los brigadistas tiene más de cinco años de experiencia, 48 son médicos especialistas y 70 son licenciados, de ellos 60 en enfermería.
Aliot Fernández Valle, anestesiólogo desde hace 17 años, expresó que la misión constituye un orgullo y un reto que aún no había podido cumplir debido a su quehacer como jefe del servicio en el hospital pediátrico William Soler, en La Habana.
Explicó que los especialistas a su cargo en Azerbaiyán se implicarán en la actividad quirúrgica y en el tratamiento a pacientes graves y críticos en las unidades de cuidados intensivos.
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