Cuba proyecta para 2021 un presupuesto del Estado eminentemente social (+fotos)

La Ley del Presupuesto del Estado para 2021, presentada este 17 de diciembre en el VI período ordinario de sesiones de la Asamblea Nacional del Poder Popular, continuará subsidiando un grupo de programas y productos de alta sensibilidad para la población cubana, además de mantener su carácter eminentemente social.

Meisi Bolaños, ministra de Finanzas y Precios, explicó en presencia del General de Ejército Raúl Castro, Primer Secretario del Comité Central del Partido, y de Miguel Díaz-Canel, Presidente de la República, que la propuesta responde al primer año de la implementación del ordenamiento monetario, cambiario y financiero en el país, que contempla la corrección gradual de los precios mayoristas y minoristas.

Con el propósito de proteger a la población por el efecto de la devaluación del peso cubano, se subsidian los precios y tarifas de un grupo de productos de alta sensibilidad, para lo que se destinan 26 mil 263 millones de pesos.

Se cubren fundamentalmente productos alimenticios de entregas específicas a niños, dietas a embarazadas y fórmula basal, por enfermedades crónicas de la infancia, productos no alimenticios de venta regulada (canastilla), servicios necrológicos de incineración, subsidio parcial de la energía eléctrica para el sector residencial, servicios de transportación urbana de pasajeros, área, taxis ruteros en La Habana, catamarán y ferrocarril, medicamentos controlados, productos de óptica, artículos médicos y calzado profiláctico.

El presupuesto continuará financiando programas estatales de prioridad en función del desarrollo del sector productivo, entre ellos la ganadería genética vacuna, el mantenimiento silvícola forestal y la reparación de caminos cañeros.

Se mantiene el financiamiento del 50 por ciento de las primas de seguro, por créditos otorgados a productores agropecuarios para incrementar la producción de productos priorizados y en correspondencia con el fomento agropecuario, así como en un grupo de producciones agrícolas de forma temporal.

Para el financiamiento de inversiones materiales, en correspondencia con el Plan de la Economía, se destinan 29 mil 636 millones (programas de viviendas, de fuentes renovables de energía, de desarrollo de los trasvases y obras de infraestructura, turismo, Fondo de Desarrollo Forestal).

Entre los principales cambios que se incorporan en el Presupuesto del venidero año está la autorización al cierre de 2021 para que los gobiernos municipales puedan retener un porcentaje de los sobrecumplimientos de los ingresos cedidos a recaudar para que los puedan emplear en el próximo ejercicio.

En sentido tributario, se aplicarán con carácter general los impuestos sobre las ventas y los servicios, con un tipo impositivo reducido en relación con periodos anteriores, del 10 por ciento.

La titular aclaró que se exceptúa la comercialización minorista de productos y servicios, que se mantienen subsidiados por su alto impacto en la población.

Se extiende la aplicación del Impuesto por la Ociosidad de la Tierras Agrícola y Forestales a todas las provincias y al municipio Especial Isla de la Juventud, y se aplicarán los impuestos por el Uso y Explotación de Bahías y por el Vertimiento de Residuales aprobado, en las bahías de La Habana, Matanzas y Cienfuegos, así como en las cuencas hidrográficas que tributan a estas; hasta la fecha solo se aplica en la capital.

Bolaños informó que la campaña de Declaración y Pago de los Tributos se iniciará el 28 de enero de 2021, y se exonera del pago anual del Impuesto sobre Ingresos Personales, mediante declaración jurada, a los trabajadores por cuenta propia que se mantuvieron suspendidos por seis meses o más a causa de la COVID-19, como medida compensatoria a la pérdida de ingresos en 2020.

Además, se incorpora una disposición especial para facultar a los consejos de la administración municipales y a los consejos populares, según corresponda, para establecer bonificaciones totales o parciales en el pago de los impuestos sobre las ventas y los servicios a las formas de gestión no estatal

Según la ministra de Finanzas y Precios, como resultado de la implementación del ordenamiento monetario se transforma la participación de los diferentes conceptos de ingresos en el Presupuesto del Estado.

Los tributarios representan el 39 por ciento, en lo que repercuten fundamentalmente las adecuaciones en los impuestos sobre las ventas y los servicios y los especiales.

La recaudación del Impuesto sobre Ingresos Personales se proyecta en seis mil 844 millones de pesos, que incluyen las retenciones del impuesto de los trabajadores estatales, y los aportes de las formas de gestión no estatal se proyectan en el orden del cuatro por ciento de los ingresos brutos.

Los aportes del sector agropecuario, por la retención del cinco por ciento del valor de acopio de sus producciones, ascenderán a mil 300 millones de precios aproximadamente, y la contribución territorial para el desarrollo local se proyecta en cerca de cinco mil 315 millones.

En cuanto a los gastos de la actividad presupuestada, continuarán estando los principales gastos en los sectores de Salud Pública y Asistencia Social, seguida por Educación, Administración Pública y Seguridad Social.

Se destinan 33 mil 139 millones de pesos para cubrir los gastos por las prestaciones de la Seguridad Social y para financiar la Asistencia Social se consideran tres mil 366 millones de pesos, precisó Bolaños.

Se prevé, además, una reserva en los presupuestos locales para gastos de asistencia social con el propósito de enfrentar las necesidades de financiamiento de personas vulnerables que se identifiquen como resultado de la aplicación del ordenamiento.

Los gastos de la Administración Pública incluyen el subsidio a personas de bajos ingresos con necesidad de acometer acciones constructivas en sus viviendas, los financiamientos a las madres con más de tres hijos menores de 17 años de edad, para la construcción o ampliación de sus viviendas, así como el respaldo a las actividades relacionadas con la defensa y el orden interior.

A decir de la ministra, como resultado de los ingresos que se planifican recaudar y los gastos que se proyectan ejecutar, se obtiene un déficit fiscal para el año de 86 mil 744 millones 500 mil pesos con carácter de máximo, el que si bien respalda los principales programas sociales, es alto.

Se requiere trabajar con la intención de mejorar ese déficit proyectado a partir de una mayor eficiencia del gasto público y el aumento de los ingresos al Presupuesto, por lo que se deben incrementar las acciones encaminadas al fortalecimiento de la contabilidad en todas las entidades del país y las medidas preventivas, aseveró.