El exvicepresidente de Estados Unidos Josep Biden sugirió que el servicio secreto ofrezca protección a los candidatos presidenciales demócratas después de protestas en su mitin por la victoria en la jornada del supermartes.
Biden, quien lidera a los demócratas tras ganar la mayoría de los 14 estados que celebraron primarias el 3 de marzo, dijo al programa Today de la NBC que no debería recaer en su esposa ‘el impedir que los manifestantes o cualquier otra persona lo alcanzara’.
Los comentarios los hizo por un incidente durante la celebración en California por los resultados del crucial concurso y el personal de su campaña se vio obligado a someter a algunos individuos que se abalanzaron sobre el escenario.
Después de observar el video de Jill Biden esquivando a un manifestante, el presidente del Comité de Seguridad Nacional de la Cámara de Representantes, Bennie Thompson, pidió que se decida inmediatamente sobre el apoyo para Biden y el senador Bernie Sanders, los dos rivales que luchan por la nominación del Partido Demócrata.
Thompson envió el miércoles una carta al secretario de Seguridad Nacional en funciones, Chad Wolf, y a los miembros del Comité Asesor de Protección de Candidatos.
El congresista calificó el evento del martes de ‘inquietante’ y dijo al diario Politico que sería ‘prudente aumentar la seguridad’ de los candidatos, pues ‘no queremos que alguien loco ahí fuera les haga daño a ellos o a sus familias’.
La aprobación de la protección del Servicio Secreto de Barack Obama en mayo de 2007 marcó la primera vez en la historia de Estados Unidos que un candidato presidencial tuvo protección casi dos años antes de una elección.
Debido a la naturaleza de su histórica campaña, el entonces senador Obama se enfrentó a una multitud de amenazas, lo que llevó al legislador Dick Durbin en abril de ese año a asegurarse de que su colega recibiera protección.
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