Excelente conversador, y siempre dispuesto a dialogar con la prensa, accedió a contestar varias preguntas para los lectores de Granma, previo a un juego de confrontación entre la preselección que se adiestra rumbo al Preolímpico de Arizona, y el equipo Industriales.
-Es el jugador más experimentado de la actual preselección. ¿Cómo ve al grupo y qué aspectos pudiera destacar de la preparación?
-La preparación ha marchado cumpliendo en cada momento con los objetivos planificados. Debido a las restricciones impuestas por Estados Unidos, debimos viajar a México para obtener las visas al evento. Allí celebramos dos desafíos que nos sirvieron para ir evaluando varios parámetros de juego, y en ellos los muchachos se expresaron con un magnífico estado de ánimo.
-Resulta una incógnita el aspecto ofensivo, ¿por qué una y otra vez no se tienen buenos resultados madero en ristre?
-Lo primero a tener en cuenta es que son eventos cortos, y no somos nosotros solos quienes no logramos producir, pero sucede que nuestra afición nos exige la victoria a toda costa y no siempre es así. No hemos hecho algo extraordinario, nos preparamos con lo que tenemos a nuestro alcance.
-Durante el Premier 12 recuperó la condición que años atrás tuvo como capitán del seleccionado. ¿Cómo recibió esa designación?
-El liderazgo se produce por la forma en la que trato a mis compañeros. Salgo al terreno a entregarme por completo. Si el colectivo decide que debo asumir esta condición, la asumo, pero no persigo esas cosas. Lo mío es jugar béisbol.
-¿Qué piensa sobre este difícil compromiso de Arizona para tratar de alcanzar el sueño olímpico de Tokio 2020?
-Lo primero es defender a Cuba a toda costa. Con independencia del resultado, saldremos a divertirnos. Muchos factores inciden en los marcadores finales, pero les aseguro que siempre vamos con todo y damos lo mejor en cada salida en busca de la victoria.
-¿Es un ambidextro natural o alguien le inculcó esto desde pequeño?
-Yo soy ambidextro porque mi papá me lo enseñó y se dedicó a trabajar conmigo día a día para perfeccionarlo. En buena medida, lo que he logrado en la pelota se lo debo a mi padre, Pablo Francisco Cepeda.
-A sus 39 años se mantiene bien físicamente. ¿Piensa en el retiro?
-Lo que más me gusta en la vida es jugar a la pelota, lo sigo disfrutando como el primer día. Mientras me mantenga sano y con un rendimiento aceptable, estaré activo.
-En la pasada campaña llegó a dos cifras redondas importantes: 2 000 jits y 300 jonrones. ¿Alguna meta inmediata para la Serie 60?
-En cuanto a marcas, quiero llegar a los 400 dobles, me faltan 13 para alcanzarlos.
-¿Qué opinión le merece Miguel Borroto?
-Yo soy alumno de Borroto desde que era un niño. Lo respeto y lo admiro como a un padre.
Escambray se reserva el derecho de la publicación de los comentarios. No se harán visibles aquellos que sean denigrantes, ofensivos, difamatorios, o atenten contra la dignidad de una persona o grupo social, así como los que no guarden relación con el tema en cuestión.