En el Hospital Provincial de Rehabilitación Faustino Pérez, primer centro de aislamiento habilitado en la provincia para el tratamiento de los casos sospechosos a la COVID-19, se hallan ingresados actualmente 21 espirituanos, los cuales hasta el momento están asintomáticos.
De acuerdo con el doctor Manuel Rivero Abella, director provincial de Salud, hasta la fecha han sido dados de alta seis pacientes, la mayoría relacionados con el primer evento: contactos directos de los italianos confirmados como los primeros casos de COVID-19 en Cuba.
“Quienes egresan siguen en vigilancia epidemiológica en sus áreas de salud hasta completar los 14 días —afirma Rivero Abella—. Resulta válido decir, además, que hasta la tarde de este viernes ninguno de los hisopados nasofaríngeos realizados a los casos sospechosos ingresados en la provincia ha sido positivo a este coronavirus”.
Como parte de la estrategia sanitaria del territorio, en las próximas horas se prevé la apertura de un segundo centro de aislamiento: el Centro Especializado en Servicios Educacionales Alberto Delgado, en el municipio cabecera, el cual prestará servicios de ser necesario en dependencia del incremento de casos sospechosos en la provincia.
“Contará con 120 camas, asegura el doctor, y con todos los recursos: tanto personal médico como los medios de protección. Funcionará con todas las normas epidemiológicas establecidas para esta epidemia —separación de las camas, ventilación, seguridad del personal de salud y de los pacientes, entrada y salida…— y se trabajará con un régimen de guardia de 24 por 48 horas”.
Actualmente en la Atención Primaria de Salud se encuentran en vigilancia 115 personas, que han sido contactos en espacios con casos sospechosos, a los cuales se les sigue exhaustivamente la posible aparición del más mínimo de los síntomas.
Aun cuando el protocolo dicta que los casos confirmados se trasladen hacia el Hospital Manuel Piti Fajardo, de Villa Clara, si alguno de ellos presenta complicaciones graves antes de su traslado se ha acondicionado un cubículo en la sala de Terapia Intermedia del Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos y se han aislado otras camas en el Hospital Pediátrico Provincial para los infantes.
En la provincia se disponen de nasobucos, guantes, sobre batas y otros medios para garantizar la seguridad de quienes laboran directamente con los pacientes y se cuenta también con el personal de salud especializado para brindar una atención esmerada.
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