Segunda quincena de marzo de 2020. Justo cuando el equipo reporteril de Escambray se acerca al palpitar cotidiano del nivel de Atención Primaria de Salud en el territorio, los dúos que laboran en los Consultorios del Médico de la Familia (CMF), de los que suman 465 en la provincia) se incorporan a una acción determinante para la prevención de la enfermedad que días atrás hizo su aparición en Cuba justo por suelo espirituano.
“El pasado día 17 añadimos a nuestro accionar una pesquisa activa de todos los viajeros, nacionales o extranjeros que hayan llegado desde fuera de Cuba en estas nuevas circunstancias, buscando la posibilidad de que aparezca un síntoma de Infección Respiratoria Aguda (IRA) para tratarla a tiempo. La pesquisa se concibió también para ancianos que viven solos, por tratarse de un grupo poblacional más vulnerable, y para toda persona con síntomas de una enfermedad respiratoria”, explica el doctor Héctor Luis Hurtado Luna, jefe de la Sección de Atención Primaria en la Dirección Provincial de Salud.
Quienes andan ahora mismo palpando en el terreno cualquier alteración al respirar, vestigio de tos o aumento de la temperatura corporal de los pobladores a quienes atienden —o de personas venidas de allende los mares—, no van a los barrios con la misma carga de conocimientos de que disponían semanas atrás, advierte Luna. Y ciertamente, desde que la COVID-19, aún sin nombre, emergiera en la ciudad china de Wuhan a finales del año pasado, en Cuba las alertas se activaron y poco después ese mismo personal médico y de Enfermería comenzaba a repasar, en citas colectivas, síntomas, modos de actuación ante enfermedades de vías respiratorias y acciones para prevenirlas.
Aquella sería la capacitación inicial. Poco a poco y por diferentes vías les fue llegando información acerca del nuevo coronavirus y desde el 9 de marzo, cuando un grupo de especialistas del patio recién venido del Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí, donde se preparó, impartió conferencias a quienes harían de facilitadores, la actualización comenzó a bajar, en forma de cascada, hacia los hospitales, policlínicos y CMF de todos los municipios.
CAPACITACIÓN EXHAUSTIVA
La doctora Magalys Echemendía Marrero, rectora de la Universidad de Ciencias Médicas de Sancti Spíritus, quien está al frente de la capacitación sobre la COVID-19 en el territorio, sostiene que en las últimas décadas aquí no se había vivido un proceso tan amplio y heterogéneo dirigido a preparar a sectores de la población para emergencia de salud alguna. “Lo de ahora no tiene precedentes, hemos sido muy exhaustivos y no creo que en otro país del mundo esté sucediendo algo similar”, declara.
Las evidencias, debidamente registradas, no la dejan mentir: en esa institución, así como en policlínicos y hospitales, se ha preparado ya el ciento por ciento de los trabajadores vinculados a la Salud Pública, incluyendo los de servicios. Las acciones se extendían, además, a todos los estudiantes de las carreras que imparte la institución, así como a miles de personas de las Organizaciones de la Administración Central del Estado, empresas y organismos, trabajadores por cuenta propia y cuadros de organizaciones políticas y de masas.
DE LA INCERTIDUMBRE AL CONOCIMIENTO
Casi en la intersección de las calles Carretera Central y Comandante Fajardo (Sobral), donde radica el CMF No.15 del área Centro, en el municipio cabecera, la doctora Mariselys Casanova Cruz se alterna con dos médicos residentes en la atención a las personas que acuden. Especialista en Medicina General Integral y con 25 años de experiencia en esas lides, conoce la manera de llegar mejor a su población, compuesta por más de 1 250 pacientes.
“Nuestra principal tarea es promover salud y prevenir enfermedades. Con la COVID-19 resulta particularmente decisiva la orientación a los pacientes, por lo que tenemos un cronograma de audiencias sanitarias que incluyen no solo a las familias, sino también a centros de trabajo grandes ubicados en nuestra área de acción”, refiere.
Si bien no ha habido mucha afluencia de ciudadanos con sintomatología respiratoria y los que acuden no constituyen hasta ahora riesgo epidemiológico, se percibe a las claras, dice, la efectividad de los mensajes: ya no abundan los nasobucos colgados del cuello, cual si fuesen collares; ni se percibe la incertidumbre antes presente casi en cada rostro, porque se han aclarado muchas dudas. “El conocimiento ayuda a calmar la ansiedad”, apunta Mariselys, quien confía en la infraestructura del sistema de salud cubano para evitar el colapso que se ha producido en otras naciones.
“Gracias a la información del Control Sanitario Internacional tenemos dominio de las personas que llegan desde el extranjero y les damos seguimiento por 14 días, pues en ese lapso pueden aparecer síntomas. Vamos al lugar donde se encuentran y en dependencia del país del que provienen se les indican los complementarios”, reseña.
EL TIEMPO, RECURSO MÁS PRECIADO
En la Dirección Provincial de Salud, el doctor Héctor Luis Hurtado Luna, también fundador del Programa del Médico y la Enfermera de la Familia, ha hecho un paréntesis en su apretada agenda para transmitir a través de Escambray información y consideraciones importantes.
Tras subrayar la preparación del personal del nivel de atención primaria para encaminar casos sospechosos de una IRA comenta que, de considerarlo necesario, los médicos de la familia remiten a los enfermos a las consultas habilitadas con ese fin en cada uno de los policlínicos de la provincia, 23 en total, sin excluir zonas rurales. “Allí una comisión integrada por profesores de esa institución los evalúa, y en dependencia de la sintomatología y del gen epidemiológico —la posibilidad de haber estado en contacto con algún viajero proveniente del exterior— determina la conducta a seguir”, pormenoriza.
Los hospitales municipales también tienen una consulta especializada y en cada uno de estos centros hay un local para aislar al paciente ‘sospechoso’ de COVID-19, hasta tanto sea trasladado por el Servicio de Ambulancias, amplía Luna. “Nunca van a ser extremas las medidas que se tomen para evitar la transmisión”, pronuncia de manera enfática, y una vez más recalca el factor determinante en ese empeño: el tiempo. “Tenemos suficiente disponibilidad de médicos y enfermeras, pero necesitamos que las personas acudan al médico ante el primer síntoma, porque el momento en que diagnostiquemos es fundamental para actuar de manera oportuna; a tiempo todo tiene solución”.
Que alegría ver a mi profesora y colega Marisely, me ha emocionado mucho.
Quisiera el protocolo de actuacion para los casos sospechosos atendidos para las salas de aislamiento de los policlinicos
si confio mucho en el sistema de salud de nuestro pais y sobre todo en la abnegacion y capacidad de nuestros medicos enfermeras y todos los que laboran en los hospitales incluyendo a los que apoyan con la limpieza y desinfeccion de las casas calles hospitales y demas
quisiera les dijeran a todos que los que por diversos motivos estamos en otros paises nos sentimos seguros que nuestros familiares estan siendo los mejor atendidos del munodo pues a pesar de las escaseces materiales ellos reciben todo el amor y sacrificio de nuestro personal de salud, gracias a todos los admiramos y agradecemos mucho
saben anoche soñe que Cuba habia descubierto un antidoto o vacuna contra este virus estudiando el comportamiento de el coronaviro de los felinos quizas fue que me quede dormida mirando mi gato o una señal del que nos creo, soñe que habia algo en ellos que impedia el avance de las moleculas de esos virus, jaja como no se nada de eso quise contarselos pues solo fue un sueño
GRACIAS PUEBLO CUBANO