Quizás el desenfado es lo que les ha permitido a los jóvenes estar en la primera línea de fuego. Con ese valor salen a las calles y de casa en casa lo mismo preguntan por síntomas gripales, que llevan un producto de primera necesidad hasta quienes lo necesitan. Desafían las Zonas Rojas en los centros de aislamiento y también se han ido al campo cuando la agricultura se ha visto en jaque.
Y es esa la juventud espirituana, que ha jugado un rol protagónico en el enfrentamiento al virus SARS-CoV-2. Desde la ciencia, la producción, la salud y otros sectores, cumplen diversas tareas en medio de este escenario epidemiológico. “Nuestros jóvenes se caracterizan por ser entusiastas, creativos y comprometidos con la obra revolucionaria”, detalla Yadira Díaz Chinea, primera secretaria de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) en Sancti Spíritus, quien transita junto a ellos esta ruta de lucha contra el coronavirus.
¿Cuáles han sido las principales tareas en las que se han insertado los jóvenes ante la actual situación epidemiológica?
Hay que destacar la labor altruista de nuestro personal de salud en el cuidado y atención de los pacientes enfermos, su vinculación en la Zona Roja trabajando directamente con pacientes en vigilancia, sospechosos y positivos. También hay que resaltar la participación de los estudiantes de la Universidad de Ciencias Médicas en las pesquisas activas, labor que ha sido reconocida por el pueblo espirituano. A todo ello se suma la labor de los trabajadores sociales y jóvenes en la atención a la familia en las zonas de cuarentena y restricción.
Se han vinculado además a la producción de alimentos en todos los polos productivos de la provincia, con las siembras de ciclo corto, la limpia y plantación de caña, así como en diferentes actividades dentro de los organopónicos de cada uno de los municipios. Han apoyado la construcción de viviendas y ampliación de naves para criaderos de animales. Se construyeron brigadas de apoyo para el transporte, las cuales contribuyeron a la disciplina y organización en las paradas, fiscalizando el aislamiento social y el control de la capacidad de los ómnibus.
Además, con la presencia de los jóvenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, el Ministerio del Interior y otros organismos, se trabaja en la organización de las colas y en el enfrentamiento a coleros, acaparadores y revendedores, las indisciplinas sociales y el delito. Todas estas tareas, entre muchas otras, se han aglutinado a través de las brigadas Jóvenes por la Vida.
¿Cómo se ha garantizado su seguridad desde el punto de vista de su salud en tales circunstancias?
Han sido fieles observadores de los protocolos establecidos por el Ministerio de Salud Pública y las orientaciones de los Consejos de Defensa para evitar la propagación de los contagios y han cumplido con las medidas establecidas para las diferentes etapas.
¿Cree que las nuevas generaciones han sido consecuentes al asumir este papel?
A los jóvenes la Revolución los ha preparado para enfrentar las tareas más complejas, y aunque esta pandemia se torna difícil, el papel de los científicos y técnicos ha sido crucial en el enfrentamiento, al crear una vigilancia activa, nuevos protocolos de atención, medicamentos y estudios vacunales. Tal condición demuestra que los conocimientos adquiridos ponen a los jóvenes en condiciones de enfrentar los más grandes desafíos.
¿La labor de ellos ha sido reconocida?
Desde inicios de la pandemia hemos estado reconociendo la labor de los jóvenes a través de los diferentes medios de difusión con que cuenta la provincia. También con la condición excepcional Jóvenes por la Vida, que otorga el Buró Nacional de la UJC, a todos los que han aportado a esta batalla.
¿Qué han demostrado los jóvenes con este cambio de escenario?
Han demostrado que han sido protagonistas en todas las etapas y que esta no podía dejar de ser una más. Han mostrado su entrega, su valía, y han dejado claro que la Revolución siempre podrá contar con ellos.
¿Algún mensaje para los jóvenes espirituanos?
Primero, que nos sentimos orgullosos de ellos. En los momentos difíciles, en las tareas más heroicas y hermosas, siempre han estado presentes, prestos a convertir los desafíos en victorias. Y en ese espíritu nos inspiramos, junto a la alegría y el entusiasmo, la fuerza del trabajo creador, como en esta batalla contra la pandemia. Les transmito a nombre del Buró Provincial de la UJC nuestra confianza y que estaremos siempre a la altura de la historia.
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