“Aprobamos nuestra estrategia económica y social con el objetivo de impulsar todo lo que estaba pendiente de implementación luego de aprobarse en el Congreso del Partido, y también para potenciar nuestra economía en una situación de crisis pos-COVID”, aseguró el Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en su comparecencia de este jueves en el espacio televisivo Mesa Redonda.
Recordó todo lo complicado del escenario actual, por la contracción del turismo y de las exportaciones, la incertidumbre en los abastecimientos de combustible, la reducción de las producciones con el lógico efecto en la oferta de bienes y servicios; el desabastecimiento en la red de comercio y una inflación que ya se ve, entre otros efectos negativos de la situación económica mundial.
Díaz- Canel declaró: “Hemos tenido que introducir una necesaria y no deseada parcial dolarización de la economía, y hemos estado enfrentando las manifestaciones de delito e ilegalidades. En medio de todo ello nos hemos planteado la tarea ordenamiento, que es la que debe llevarnos a la unificación monetaria y cambiaria, uno de los acuerdos pendientes del Congreso”.
Sobre ese tema, que ha despertado un natural interés por parte de la población, advirtió que no habrá terapias de choque y recordó que en Cuba nadie quedará desamparado. También dijo que se preservarán las conquistas fundamentales de la Revolución, tales como la Educación y la Salud, y aseveró que en una primera etapa se mantendrá la Libreta de Abastecimiento.
Aclaró también que el Estado cubano garantizará los depósitos en los bancos, tanto a nacionales como a extranjeros, sean en pesos cubanos, pesos convertibles o moneda libremente convertible. Aludió a las falsas noticias que circulan en torno a la fecha en que se implementará la unificación monetaria y cambiariay llamó a no hacerse eco de las llamadas bolas. La novedad, expresó el Presidente cubano, será informada con tiempo suficiente para que las personas se puedan planificar, no de un día para otro.
Sobre este tema anunció que habrá comparecencias especiales en las próximas semanas, en las cuales se explicará todo al detalle para ir preparando a la población en torno a un proceso muy sensible y determinante para el país.
Considero que la unificación monetaria es lógica y necesaria pero se sigue hablando de incrementos salariales y a casi todos parece bueno sin embargo esto trae como consecuencia más dinero circulando y por tanto más reembolso. Si queremos de verdad corregir la inflación y tener mayor liquidez sería conveniente en vez de incrementar salarios corregir y adecuar los precios de los productos. Si esos precios exorbitantes que tienen infinidades de mercancías en las tiendas se bajan sin dejar de generar ganancias sería más factible. Son innumerables los productos con precios altos que persisten meses y hasta años en tiendas. No se hacen rebajas a tiempo. Cuando se rebaja un producto ya no sirve o está muy defectuoso. Se ha perdido confianza en la calidad de muchos equipos o mercancías, como las motos y bicicletas eléctricas por ejemplo. En esto hay que pensar y tomar medidas objetivas. En la «calle» el problema es hasta risible, hace 5 año un rayado costaba 1 peso, al cabo de poco tiempo, dos, tres. Hoy te cobran 5 pesos. Lo mismo pasa con el frozen, las pizzas, etcétera. Está de moda la pregunta retórica: A dónde vamos a parar