El mundo asiste a una de las pandemias más mortíferas de las que hayan existido. Cuba enfrenta esta batalla contra el nuevo coronavirus con todo el coraje propio de los valientes; desafía bloqueos, carencias, emplea para bien el talento de sus científicos. Sin embargo, personas sin escrúpulos, escasos de alma y de conciencia ciudadana deciden convertir el más reciente pesquisador virtual cubano en una especie de juego online.
Apenas cuatro días después de activada la aplicación en Internet para identificar en tiempo real a los ciudadanos con algunos de los síntomas de la COVID-19, unas 1 200 personas autopesquisadas en Cuba informaron datos falsos, declarando, incluso, haber tenido contacto con casos positivos de la enfermedad.
A juzgar por los datos y el llamado de la máxima dirección del país a ofrecer la información con absoluta veracidad, en varias provincias cubanas algunos ciudadanos no asumen con responsabilidad esta novedosa alternativa tecnológica.
Sancti Spíritus no es la excepción. A pesar de contar hasta mediados de semana con más de 2 760 pesquisas virtuales y figurar como una de las provincias con mayor acceso de usuarios a la multiplataforma, más de 80 autopesquisas resultaron falsas y, a la postre, las justificaciones esgrimidas se tornaron poco creíbles.
Aunque la cifra de estos supuestos incautos no sea abrumadora, en Sancti Spíritus y en el país, tal ingenuidad, entre comillas, ha implicado activar médicos y enfermeros de la familia y transporte cuando se trata de lugares distantes; en fin, poner en código rojo todo el sistema creado para atender con celeridad cada uno de los reportes.
¿Acto de mala fe?, ¿intenciones de trastocar la labor titánica de enfrentamiento epidemiológico que cientos de miles de cubanos protagonizan contra el nuevo coronavirus? Los hechos ofrecen diversas lecturas del asunto.
Autoridades sanitarias en la provincia, sin medias tintas, califican de irresponsables a estos ciudadanos, que con tranquilidad pasmosa han alegado haberse equivocado en las respuestas o haber permitido, por ejemplo, que un adolescente haya pesquisado la familia entera sin haberlo percibido nadie en casa.
Salvo algunos adultos mayores con lógicos errores de comprensión en el llenado del cuestionario, otros reportes no debían estar errados por la facilidad que ofrece la aplicación desarrollada por la Universidad de las Ciencias Informáticas, de La Habana.
En palabras del primer ministro de Cuba, Manuel Marrero Cruz, es inadmisible que esta herramienta, devenida paso de avance para que la propia persona se autopesquise, sea utilizada por un grupo de personas para desvirtuar la atención del personal de la Salud.
“¿Qué se hace con los que dan la información falsa y provocan la movilización de fuerzas de la Salud Pública sin necesidad?”. La pregunta de Marrero Cruz toma asiento en medio de la lucha contra quienes desafían las medidas implementadas para encarar la COVID-19.
En opinión de la doctora Zamira Méndez Reus, funcionaria de la Dirección Provincial de Salud, no ser transparente en la información ofrecida conlleva a trabajar con datos falsos y, como es obvio, implica engranar el sistema en función de las atenciones médicas a quienes se declaren sintomáticos o que, al menos, refieran ser contacto de algún caso positivo, a través de esta herramienta digital.
El pesquisador virtual constituye una de las tecnologías sanitarias más importantes utilizadas por el sistema de Salud cubano en el enfrentamiento a la pandemia. La veracidad de los datos suministrados puede salvar vidas en primer término y, en segundo, ayudar a captar información sobre el estado de salud de la población; no debe perderse de vista que esta herramienta deviene complemento al proceso de pesquisa activa en la comunidad.
En tiempos de coronavirus, la balanza se inclina a favor de la responsabilidad individual y colectiva por la salud de un país que homéricamente salva a sus hijos; la vida, entonces, no entra en juego alguno, es sagrada.
¡! MUY JUSTA FUE LA SANCION ¡!
(Juicio celebrado por ataque a la autoridad con arma blanca en medio de la Covid en VC)
—1—
La insensatez y malas acciones
de gente indecorosa
prueba fuerza ante cosas
sin respetar indicaciones
solo piensan en tentaciones
como el ´´guapo´´ callejero
ese ente poco sincero
que sin respeto y necedad
crea la inseguridad
como un ´´oeste´´ verdadero.
-2-
En medio de la pandemia
merecen estos delincuentes
la privación de libertad vigente
por crear tanta tragedia
ya la ´´multa´´ no remedia
en esta gravísima acción
fíjese en la maldición
sale en busca del machete
ataca a la autoridad,…cual cohete
¡! Muy justa fue la sanción ¡!.
—000—
EL POETA YUMURINO
29 de Abril de 2020