“Trinidad tiene que abrirse al turismo”, expresó el primer ministro, Manuel Marrero Cruz, al conocer de las principales afectaciones ocasionadas por las intensas lluvias en este territorio y el comportamiento de la COVID-19, con una evidente tendencia al control de la enfermedad, reconoció la capacidad de las autoridades locales y la disciplina de la población, lo cual permite afirmar “el cumplimiento de manera sostenida de los indicadores correspondientes a la fase 1 de la etapa de recuperación post epidemia y la propuesta de transitar hacia ella, aunque la provincia se encuentre aún en transmisión autóctona limitada.
“Eso no significa bajar el rigor en la vigilancia por parte de las autoridades sanitarias, ni tampoco la disciplina de los trinitarios, pero ratifica los criterios más actualizados en el plan trazado por el gobierno cubano camino hacia la nueva normalidad y que particulariza los escenarios epidemiológicos y las prioridades de cada territorio”.
Marrero Cruz, acompañado por Deivy Pérez Martín, presidenta del Consejo de Defensa Provincial, se interesó por las pérdidas contabilizadas ya en la agricultura e instó a recuperar todo lo que sea posible, “hay que defender el principio de que el municipio debe producir lo que demanda el pueblo y también satisfacer los encargos de la industria del ocio”; por ello es impostergable recuperar los polos productivos e incrementarlos.
Sobre la cosecha cafetalera, la vicepresidenta del Consejo de Defensa Municipal, Tania Gutiérrez Fontanills, informó que los daños no resultan significativos al preverse la pérdida de unas 340 latas de café en Topes de Collantes, menos de una tonelada, lo cual no compromete el cumplimiento de los compromisos que rondan las 220 toneladas del grano.
Marrero Cruz subrayó que durante estos meses de enfrentamiento al virus SARS-Cov-2 la ciudad luce demasiado quieta y se extraña la vida animada que la distingue y que debe regresar progresivamente, por lo que instó a revitalizar las instalaciones turísticas y el resto de las actividades y servicios.
El primer ministro elogió asimismo la eficacia con la que las autoridades sanitarias, el Consejo de Defensa Municipal y los directivos del Ministerio del Turismo trabajaron en el evento de transmisión local originado en el hotel Village Costasur y ratificó la confianza en que este sector cuenta con todos los recursos para garantizar la seguridad de los trabajadores y los clientes.
Necesitamos la apertura de Trinidad, muchos turistas desean eso para venir a Cuba. La responsabilidad es la actitud correcta ante la pandemia, no el cerrar las puertas al desarrollo. Gracias, Ministro, por su visión amplia del futuro. Esperamos que anuncie pronto la nueva normalidad para Trinidad. Es el deseo del pueblo.
Después de Osmani Cienfuegos. Que fue el precursor del desarrollo turístico. Ha sido el mejor Ministro del Turismo. Todavía se le extraña. Por suerte desde su cargo. Sigue atendiendo el sector.
El Balneario Trinitario es uno de los polos turísticos más gustados del Primer Ministro, visitas asiduas enzalzan sus encuentros con ciudadanos y trabajadores del turismo, consejos, formas de actuar, maneras y más siempre acompañan los consejos de cada visita en aras de mejorar, el trato y el servicio.