Fuerzas de la Empresa Provincial de Aseguramiento al Sector Educacional acometen reparaciones en varios de sus locales
Poco a poco desaparecen el verdor y la fetidez que por años ha sido un adoso en el fondo de la EIDE Lino Salabarría. Son las marcas de las filtraciones, que delatan el deterioro de un centro reparado al calor de la Batalla de Ideas casi veinte años atrás y que con el tiempo dejó ver, en parte, las deudas con la calidad.
Mas, desde hace dos meses el habitual ajetreo deportivo cesó por la parada que impuso la pandemia del nuevo coronavirus y apareció entonces la entidad constructora a fin de entregar una escuela con mejor presencia.
“El trabajo se ha concentrado en el bloque de los albergues del 7 al 9, que ha tenido muchos problemas hidrosanitarios y eléctricos —explica Royman Figueredo, director del centro—; esos locales se preparan para los niños de primaria y tendrán más confort, incluido aire acondicionado”.
El olor a nuevo va pintando las áreas en reparación. Hombres de la brigada de construcción de la Empresa provincial de Aseguramiento al Sector Educacional acometen con precisión cada labor, respaldados por cerca de 400 000 pesos (sin incluir la parte eléctrica) y con garantía de recursos.
“Cuando llegamos esto estaba de madre, todo el mundo le tenía miedo, pero le fuimos arriba”, asegura Edgardo Lara Amézaga, jefe de la brigada. “Logramos contener todas las filtraciones. Había problemas en la sanitaria, colocaciones de rejillas, instalaciones hidráulicas, pero hemos cumplido la secuencia constructiva porque los recursos nos han faltado, cuando falló el polvo y unos días la piedra, adelantamos en otras cosas, incluso estaríamos más adelantados de no ser porque han surgido cambios en el proyecto”, añade Lara Amezaga.
Según la fuente, las labores rebasan el 80 por ciento de un cronograma que intenta optimizar los recursos. “La demora es porque tratamos de aprovechar todo el recurso existente sin descuidar la calidad del trabajo —asevera Royman—; pensábamos que iba a llevar más demolición pero el jefe de la brigada nos dijo que no porque son tuberías buenas y duraderas, ahorramos recursos y economía para seguir en lo adelante para otras áreas, porque la idea es recuperar lo que se pueda, siempre que sea duradero”.
Y aparece la frase mágica, esa que le costó al país, hace casi dos décadas, lacerar una inversión millonaria. “Con lo que se robaron en la EIDE, se construye otra”, escribiría Escambray, en esos términos en alusión a cómo el flagelo del desvío y la mala calidad desentonó con las buenas intenciones. El tiempo se encargó de corroborarlo.
Sin embargo, ahora todo parece ser diferente. “Antes de acometer cualquier acción contactamos entre todos y así se determina lo que se va a hacer, con mucha seriedad, —refiere el director del centro—; además contamos con la supervisión del Gobierno provincial que está a pie de obra con nosotros. Cuando comenzamos la reparación de los baños nos dimos cuenta de que alguien eliminó un paso ahí, no tenía el prepiso y ya lo tiene, inicialmente pensamos los trabajos para tres meses, pero aprovechamos la parada por la pandemia para hacer mejor las cosas, las separaciones de los baños, por ejemplo, las haremos con mármol, están las 45 piezas, cambiaremos las tazas sanitarias. Todo se realiza bajo un estricto control de los recursos”.
Las acciones no se detendrán. Según el director de la EIDE, también se repararán los dos teatros y el tabloncillo principal. “Tendremos un teatro principal con todas las de la ley, hasta con lunetas nuevas y conexión a Internet. El teatro del deporte donde se da la parte metodológica servirá de sala de video y televisión para los estudiantes y en el caso del tabloncillo, muy dañado por las filtraciones, se va a cambiar la madera de los esquineros y el fondo”.
Y mientras los constructores atizan pala, cemento, cuchara y todo lo demás, los trabajadores retocan su escuela. “A partir del aislamiento hicimos una estrategia para no dejar la escuela abandonada y conformamos cinco grupos de trabajadores que vienen en diferentes días y limpian e higienizan todas las áreas, incluida la docente. Hicimos un trabajo masivo en el que participaron la mayoría de los profesores y la dirección del Inder”, expresó Royman.
“Para el curso próximo todo estaría listo” asegura Edgardo y a seguidas constata otra vez el sudor de sus hombres que no detienen sus manos para que, cuando todo pase, alumnos, profesores y trabajadores todos tengan una EIDE con mejor confort.
que bueno .que estan haciendo ango bueno por la que fue y es la reina del alto rendimiento en s.s .felicito a todos aquellos que aportaron un granito de arena ahora y antes .fui fundador de la eide .siempre me acuerdo los aporte mediante anir de mi deporte el canotaje ,remo y muchos mas .espero que siga asi .y que movimiento deportivo cubano siga con existo
Ante todo, quiero expresar mi agradecimiento a todos los que intervienen en el mejoramiento de nuestra EIDE. Allí he pasado muchos momentos agradables en el área de canchas de frontenis, que practico de forma aficionada. Me llama la atención el hecho, de que no se menciona esa área exterior en el artículo. ¿Se mejora esa parte de la instalación? Es triste ver que el marabú comienza a reinar, y que, por ejemplo, un ya robusto árbol sigue creciendo pegado a una de las paredes del frontón, y tarde o temprano sus raíces la dañarán. Gracias.
Mi amigo Norberto, saludos desde África, si, ahí hemos corrido mucho junto a otros tantos, ojalá muevan algún recurso para mejorar esa área donde tantos disfrutamos.
Saludos vlado
Saludos, amigo Vlado. De vez en cuando he ido a tirar unos raquetazos, y con los agradables recuerdos se mezcla la triste imagen actual. Espero que se trabaje en eso. Abrazos.