Tormenta tropical Laura: La presa Zaza se quedó con las ganas

Contra todos los pronósticos —ya lo dice el término—, la presa Zaza, el mayor embalse de Cuba, no elevó  prácticamente su nivel de agua almacenada tras el paso de la tormenta tropical Laura por los mares al sur de Sancti Spíritus, y solo acumula poco más de 309 millones de metros cúbicos, el 34 por ciento del volumen operacional de esta obra hidráulica.

La directora técnica de la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos, Yusliadys Lorenzo Coca, manifestó que a la Zaza le entró menos de un millón de metros cúbicos, pero esta prosiguió las entregas a sus consumidores habituales, en lo fundamental a la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro y la Estación de Alevinaje, ambas entidades de La Sierpe; por lo tanto, el acuatorio mantuvo un equilibrio en el volumen almacenado.

Debido a las bajas precipitaciones reportadas, las presas espirituanas recibieron apenas 1.19 millones, en sentido general, y ahora la provincia almacena 475.6 millones, es decir, el 40 por ciento de su capacidad de llenado, indicó la funcionaria.

En el caso de las presas destinadas al abasto de agua a la población, Lebrije se encuentra al 47 por ciento, Tuinucú al 99.9 y Siguaney al 103, por lo que vierte en estos momentos, según el Puesto de Mando de la Delegación Provincial de Recursos Hidráulicos.

Entre todos los embalses, Dignorah presenta la situación más comprometida al registrar el 11 por ciento; La Felicidad acumula el 60; Higuanojo el 73, Aridanes el 79 y Banao II el 101 de su volumen.

Yusliadys Lorenzo reiteró que el sistema de pluviómetros de Recursos Hidráulicos no reportó precipitaciones significativas en Sancti Spíritus en total tras el paso de Laura —en Yaguajay apenas llovió—, con excepción de Trinidad y, particularmente, de Topes de Collantes, que sumó 140 milímetros.

A diferencia de lo ocurrido en esta oportunidad, gracias a las intensas lluvias de finales de mayo pasado, la presa Zaza recibió 100 millones de metros cúbicos de agua en esa ocasión, un alivio para la situación extremadamente crítica que exhibía el acuatorio, que ha reducido las entregas del líquido al programa arrocero por dicha causa.