El candidato a la presidencia de Bolivia por el Movimiento al Socialismo (MAS), Luis Arce Catacora, llegó este 29 de enero a la Fiscalía en La Paz rodeado de una multitud de seguidores a prestar su declaración sobre el caso del Fondo Indígena.
«íArce amigo, el pueblo está contigo!», coreaban cientos de personas que mantienen una vigilia para acompañarlo en este proceso en su contra que lo consideran una guerra jurídica conocida como lawfare.
Arce Catacora llegó ayer al país, procedente de Argentina, para iniciar su campaña electoral con miras a los comicios del 3 de mayo próximo derivados del golpe de Estado contra Evo Morales.
Al pisar el aeropuerto de la ciudad de El Alto, y antes de siquiera hacer los rutinarios trámites migratorios, el candidato presidencial recibió una orden de citación de parte del Ministerio Público.
Según la cita, debía presentarse a declarar hoy por el caso del Fondo Indígena Originario Campesino y de no acudir sería detenido.
Esta citación se inscribe en la larga lista de persecución política del gobierno golpista a miembros y seguidores del MAS.
Nada más que Arce Catacora fue elegido presidenciable por esta fuerza política, la más importante del país, los golpistas crearon una causa para sacarlo del juego de las elecciones.
«La justicia que discrimina, cita a declarar a Lucho Arce cuando pisa suelo boliviano, pero deja volver a exautoridades neoliberales que tienen procesos, sentencias y órdenes de aprehensión. Que la comunidad internacional juzgue. En Bolivia sigue la persecución política y judicial», afirmó Evo Morales en su cuenta en Twitter.
Lo cierto es que el binomio presidencial del MAS integrado además por el excanciller David Choquehuanca, de acuerdo con diversas encuestas ganaría los comicios del 3 de mayo en primera vuelta.
El domingo 19 de este mes, Evo Morales anunció la fórmula presidencial del MAS en una reunión en Argentina donde dirigentes de este Movimiento de los nueve departamentos bolivianos y del Pacto de Unidad escogieron al binomio.
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