El Senado de Estados Unidos (EE.UU.) aprobó el viernes que la votación final en el juicio político contra el presidente Donald Trump se lleve a cabo el próximo miércoles 5 de febrero.
El líder de la mayoría republicana en la cámara alta, Mitch McConnell, presentó una resolución que programó para el lunes entrante el comienzo de los argumentos de cierre del juicio y para el miércoles siguiente la votación.
La propuesta del líder republicano recibió 53 votos a favor y 47 en contra, de acuerdo con lo informado por la publicación The Hill.
De esta manera, el lunes a las 11:00 hora local los senadores darán inicio a los argumentos del cierre del impeachment y el miércoles 5 se realizará la votación final, mediante la cual el presidente sería absuelto o encontrado culpable de las acusaciones de abuso de poder y de obstrucción del Congreso.
Esos cargos fueron interpuestos por la mayoría demócrata en la Cámara de Representantes después de conocerse que Trump llamó telefónicamente al presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, para presionarlo a que investigara a rivales políticos de cara a las elecciones generales de noviembre próximo.
Trump es el tercer presidente estadounidense en ser sometido a juicio político después de los casos de Andrew Johnson en 1868 y de William Clinton en 1998.
Para que Trump sea removido de la presidencia deben votar al menos 67 congresistas en su contra, lo cual parece muy poco probable que suceda, según analistas políticos, luego que ninguno de los 53 senadores republicanos (de un total de 100 escaños) ha dicho que le quitará su respaldo al mandatario.
Senado de EE.UU. no acepta nuevas evidencias en juicio a Trump
El Senado rechazó este viernes la presentación de nuevas evidencias y testigos para el juicio político que se desarrolla en esa instancia contra Trump.
«No es necesario que el Senado vuelva a abrir la investigación que la mayoría demócrata de la Cámara de Representantes decidió concluir», destacó el líder del Partido Republicano, Mitch McConnell.
Con 51 votos a favor y 49 en contra, la Cámara Alta –de mayoría republicana– indicó que los 18 testigos presentados por el Partido Demócrata y las más de 28.000 páginas de documentos como evidencia, son suficientes para el proceso de impeachment.
«Es una gran tragedia, EE.UU. recordará este día, desafortunadamente, como uno en donde el Senado no aceptó sus responsabilidades, le dio la espalda a la verdad y llevó a cabo una farsa de juicio», afirmó el senador demócrata, Chuck Schumer.
Con esta decisión del Senado, los demócratas no lograron la testificación del exasesor de Seguridad Nacional de EE.UU., John Bolton, quien ofrecería datos reveladores sobre la relación del magnate de la Casa Blanca con Ucrania.
McConnell destacó que el juicio político contra Trump concluirá en los próximos días, mientras se espera que la votación final se realice antes del siguiente miércoles.
Para lograr la destitución del mandatario estadounidense se requiere del voto de dos tercios de la Cámara Alta y, hasta el momento, ninguno de los 53 senadores republicanos ha dicho que votará contra Trump.
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