Cuba expuso este jueves al cuerpo diplomático como los resultados de los cambios económicos validan la importancia del ordenamiento monetario para impulsar el desarrollo del país.
Durante un encuentro con embajadores acreditados en la nación para intercambiar sobre estas transformaciones, Marino Murillo, jefe de la Comisión Permanente para la Implementación y Desarrollo de los Lineamientos del Partido Comunista, reconoció lo complicado del escenario para la agenda económica.
La puesta en marcha del ordenamiento es compleja, dijo, y tiene como objetivo principal la corrección de precios relativos para dar un mayor espacio a la producción nacional, favorecer al sector exportador, estimular la sustitución de importaciones y eliminar obstáculos.
‘Este proceso mantiene un enfoque social y justo con la voluntad política del Gobierno de revisar lo que haya que revisar y corregir lo que deba y pueda ser corregido’, dijo, citado por el portal web de la Cancillería cubana.
Si bien el ordenamiento elimina los subsidios excesivos y gratuidades indebidas no se trata de una terapia de choque sino que mantiene su enfoque de justicia social, agregó.
Entre los efectos favorables de su implementación, Murillo mencionó el aumento de la búsqueda de empleos de población en edad laboral desvinculada, la detección de núcleos familiares vulnerables y la descentralización de facultades.
Además se corrigen distorsiones en la economía que se presentaban hasta antes de su aplicación, puntualizó.
En el intercambio con más de un centenar de representantes diplomáticos, participaron además, Leonardo Ramón Andollo, segundo jefe de la Comisión Permanente de Implementación y Desarrollo, y Marcelino Medina, viceministro primero de Relaciones Exteriores.
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