Los tiempos son difíciles, complejos, pero en esas situaciones retadoras es donde está la belleza de la vida revolucionaria para imponerse a los retos, recordó el Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en encuentro con directivos y trabajadores del Sistema bancario y financiero.
La ministra-presidenta del Banco Central de Cuba (BCC), Marta Wilson González, presentó —también en videoconferencia con los territorios del país— las proyecciones del trabajo de la institución para 2021, que tiene un rol vital en el actual proceso económico y social conocido como Tarea Ordenamiento.
Identificó los problemas y trabas que son necesarios resolver en el sistema bancario, entre los que incluyó las inconformidades con el servicio que prestan sus oficinas, principalmente frente a la población. Argumento que en 2020 se recibieron 630 planteamientos, de los cuales casi el 90 por ciento estuvo relacionado con la calidad del servicio.
Al fijar las prioridades para 2021, la Ministra-Presidenta del BCC destacó continuar revisando todos los procesos relacionados con la prestación de servicios para racionalizar los trámites e incrementar la utilización de los canales de pago por vía digital.
Es propósito implementar nuevos productos de ahorro y crédito en correspondencia con las condiciones de la economía y las necesidades de los diferentes actores económicos, con prioridad en los financiamientos con respaldo de liquidez en divisas y el diseño crediticio de la nueva política de vivienda.Otra prioridad es el desarrollo de la banca de fomento para la agricultura.
Especial atención prestó a los jóvenes del sistema bancario, «donde desempeñan un importante rol que al mismo tiempo les sirve de preparación para asumir responsabilidades superiores». Ellos cubren el 42 por ciento de la fuerza laboral, y 1 278 son cuadros.
Durante el debate, Orlando López Garcés, presidente del Banco Metropolitano, se refirió a la prestación de servicios poniendo por ejemplo a su institución, la que calificó de regular, según evidencian las colas y las demoras.
El directivo describió una serie de medidas que se adoptan, especialmente de bancarización y pago electrónico, «para ir hacia una nueva forma de hacer banca», dijo. Wilson González acotó que muchas de estas acciones requieren de recursos, pero también es muy importante el trato a la población.
La atención adecuada, las explicaciones al momento, generan en las personas satisfacción, incluso aunque su problema no hubiera sido resuelto; y eso no requiere invertir ni un centavo, enfatizó la ejecutiva.
Al concluir el encuentro, el Presidente de la República señaló que el sistema bancario es transversal a todos los procesos económicos y sociales.
Los problemas que enfrentamos —dijo— necesitan soluciones creativas, inteligentes y ágiles. Díaz-Canel trasladó a los cuadros y trabajadores del sistema bancario una serie de indicaciones dirigidas a enfrentar las complejidades actuales.
Reclamó dar una atención diferenciada al sistema productivo, empezando en los territorios, porque el desarrollo debe avanzar desde los municipios, desde las comunidades, sentenció.
Los llamó a mostrar flexibilidad (a la vez que reforzar el control interno y el enfrentamiento a las ilegalidades y la corrupción) e impulsar todo lo que facilite las exportaciones y la sustitución de importaciones.
Les solicitó brindar nuevos servicios, tanto para el sector productivo como para las personas; y, con base en los pilares de la gestión de gobierno, que la investigación científica y la innovación fluyan en el sistema bancario.
La reunión de trabajo del BCC estuvo presidida también por el miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Comunista de Cuba Jorge Cuevas Ramos, y el viceprimer ministro Alejandro Gil Fernández.
DE COMERCIO Y GASTRONOMÍA
Este ha sido un período complejo, con un año 2020 muy difícil que impactó de forma drástica en el comercio y la gastronomía, señaló el Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, en reunión con directivos y trabajadores del Ministerio de Comercio Interior (Mincin), la que también fue compartida en videoconferencia con los territorios del país.
Pese a los graves tropiezos, en primer lugar la agudización del bloqueo económico, comercial y financiero del gobierno de EE.UU., y la pandemia de la COVID-19, el Premier llamó a sacar las experiencias de 2020, donde se pusieron en práctica un grupo de iniciativas para enfrentarlos, como fue llevar a los barrios y a los domicilios el comercio y la gastronomía.
La ministra del Mincin, Betsy Díaz Velázquez, presentó acciones realizadas durante el 2020 y las proyecciones para el año que avanza, especialmente las vinculadas con la transformación del capital humano del sector, la capacitación y el trabajo político-ideológico.
Subrayó que a pesar del contexto complejo y singular que ha impuesto la pandemia y el bloqueo, y las restricciones a que han conllevado, se continuó atendiendo los programas priorizados, como la canasta familiar normada, las dietas médicas, la oferta de alimentos y de productos para la higiene, la canastilla, la atención a personas vulnerables, y la merienda y el uniforme escolar.
Abordó el perfeccionamiento y modernización del comercio establecidas en la Estrategia Económico-Social aprobada en julio pasado, un proceso que debe concluir este año. «Nosotros tenemos que consolidar las transformaciones en curso en correspondencia también con la Tarea Ordenamiento», explicó.
La miembro del Secretariado del Comité Central del Partido Mercedes López Acea expuso que como resultado del proceso de transformación del sector, puede palparse una forma de pensar diferente, otra forma de ver las cosas entre muchos cuadros, aunque —acotó— no en todos.
En las unidades donde se ha aplicado el perfeccionamiento, los criterios de la población son de más satisfacción, aseguró. Pero el trabajo tiene que ser mucho mejor cada día, porque ese es el pensamiento revolucionario, sentenció.
López Acea explicó que el reto ahora es avanzar en el perfeccionamiento del comercio y la gastronomía, consolidar lo que se va logrando y que el pueblo perciba en el día a día que las cosas están cambiando para mejor.
El viceprimer ministro Jorge Luis Tapa Fonseca recordó que el perfeccionamiento del sector ya fue analizado por la Asamblea Nacional del Poder Popular, y con el comienzo de su aplicación habrá que ir a rendir cuentas al Parlamento de lo que se ha hecho mostrando avances —y no pueden ser pocos—.
Exigió también explicar a los trabajadores en qué consiste el perfeccionamiento, que es precisamente lo que ellos han estado demandando, como autonomía, calidad en la gestión, capacidad innovadora, plantillas adecuadas, cultura culinaria, rescate de tradiciones, igualdad de condiciones con las formas no estales de gestión…
El nuevo modelo de gestión explicó Tapia Fonseca, tiene que ser prioridad en los municipios, en las localidades, en las comunidades rurales aisladas. Y es un proceso que incluye a las bodegas, que necesitan de una mirada diferente.
No obstante, criticó el Viceprimer ministro, el proceso va lento, un criterio en el que coincidió el Jefe del Gobierno de la República, Manuel Marrero Cruz, quien al reclamar ir más rápido en el perfeccionamiento del sector, señaló que muchas de las insatisfacciones de la población están vinculadas al comercio y la gastronomía, una realidad que se ha hecho más contundente con la Tarea Ordenamiento, especialmente con respecto a los altos precios y el desabastecimiento.
En este ramo lo más importante es la unidad que presta el servicio —reflexionó Marrero Cruz, un experto en el giro; fue por más de 15 años ministro de Turismo—, y dentro de ella la motivación de los trabajadores.
Las estructuras y las funciones pueden transformarse, pero si la mentalidad de los actores no cambia, nada cambiará, sentenció. Lo primero —enfatizó el Primer Ministro— es que cambie la mentalidad, empezando por los que dirigen. Y hay que dirigir de forma más colectiva, escuchando a los trabajadores, a los que más saben en el sector, y al pueblo.
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