Peleado del primer al noveno capítulos y definido por margen de una carrera 6-5 a favor de Granma sobre Matanzas, el segundo juego de la finalísima de la pelota cubana en su Serie 60 fue otro encuentro digno de esta fase.
La tarde del lunes en la burbuja del “Huelga” se llenó de tensiones entre tantos altibajos. Los Alazanes comenzaron agresivos y ya en las dos primeras entradas habían marcado tres carreras ante Noelvis Entensa, quien no estuvo nada bien en el partido y esta vez tampoco pudo concretar su triunfo cien en Series Nacionales.
El descontrol fue su principal enemigo. La primera carrera de los granmenses llegó luego de dos boletos y un hit impulsor de Guillermo Avilés. En el segundo regaló otro pasaporte gratis y el partido se complicó por un error del siol Erisbel Arruebarruena. Y se cumplió la cábala beisbolera de que detrás del error viene el hit. Roel Santos disparó doblete y limpió las bases.
Mas, en el quinto los Cocodrilos salieron de su pantanera ofensiva y empataron el encuentro con racimo de tres ante los envíos del zurdo Leandro Martínez. Otro zurdo Ariel Sánchez hizo trizas la teoría y le despachó cuadrangular con dos a bordo.
Parecía que llegaba el empate de los yumurinos en el play off. En el sexto se fueron delante con dos, empujadas por Yadir Drake frente a Erluis Blanco, el relevista que vino detrás de Juan Danilo Pérez, sustituto de Martínez.
Pero los muchachos de Carlos Martí, a quienes la COVID 19 no parece haberle hecho mucha mella por lo visto hasta aquí, no quisieron mucha separación en la pizarra y empataron a cinco en el cierre de ese propio acto.
Los Alazanes le llenaron las bases a Entenza y Ferrer llamó a Naykel Cruz, irrespetado por Raico Santos, quien se le adelantaba como el héroe del partido al empujar las dos del empate con hit.
Con ese abrazo se mantuvieron hasta el octavo. Una tanda matancera que en el papel parecía temible, no pasó de eso y sus mejores hombres vieron pasar las opciones de empate, dos de ellos, su cuarto bate Erisbel Arruebaruena y su quinto Yadil Drake se fueron por la vía del ponche, en el caso del primero el sexto que se toma en siete turnos en esta finalísima.
Sobre el mantener o no a Erisbel Arruebarruena como cuarto bate luego de seis ponches en siete turnos, el director de los Cocodrilos dijo después en la conferencia de prensa: “Quisimos darle un chance, para nadie es un secreto que nos ha decidido partidos, ya hay que reunirse y ver qué alineación podemos acomodar para mañana, lo real es que no se ha bateado”.
En el octavo se firmó la sentencia del partido. Yoel Suárez regaló boleto a Roel Santos, pero la amenaza pareció esfumarse con Osvaldo Abreu quien falló un toque de bola que terminó en doble play.
La escena quedó lista para que Raiko Santos se reafirmara como héroe. Le cazó un lanzamiento a Yoel Suárez y se la despareció del neutral “José Antonio Huelga”. “Hice los ajustes necesarios, me enfoqué en quedarme un poco cerrado porque me estaba abriendo en algunos pitcheos, salí siempre a hacer buenos contactos, ya en ese octavo inning que ví que habían dos outs, vine a buscar un batazo para terminar el juego y gracias a Dios salió”, expresó Raiko.
Como para demostrar que seguía vivo, este Matanzas que no se cansa de luchar, tensó otra vez la caída de la tarde. Yariel Duque encendió la brecha con hit y le siguió el siempre eficiente Ariel Sánchez con doble.
Entonces Carlos Martí mantuvo su confianza ilimitada en su principal relevista Carlos Santana y lo dejó sobre ese volcán
Con hombres en primera y tercera sin out, Yoisnel Camejo en rol de corredor emergente por Yariel Duque que bateó hit, pagó la novatada cuando con rolling de Juan Miguel Vázquez a primera , se quedó privado en tercera , no corrió hacia home para romper el doble play, como dice el librito. Cuando Santana concretó el tercer out con ponche a Eduardo Blanco, Matanzas comenzaba a ponerse contra las cuerdas con un 0-2 en la finalísima.
A ese desliz se refirió el manager Armando Ferrer en la conferencia de prensa: “Se me da esta jugada en el noveno inning, soy visitador, no me la juego en sacrificarme con Ariel Sánchez porque había dado jonrón, lo libero para que batee y me pone hombre en segunda y tercera, todos vieron la jugada, roling a primera base, en vez del corredor venir para home, se quedó en tercera parado, completaron el doble play , cuando desde la EIDE el abc de la pelota con un rolling hasta por el lanzador hay que irse para home, pues es mejor hombre en primera y segunda con un out que hombre en tercera con dos outs, pero bueno lo real es que se privó y eso está en la pelota también, es un novato, aunque este tipo de error mental no debe suceder”.
Fue otro encuentro de buen espectáculo, jugado con ardor por ambos elencos, con once hits para los ganadores y nueve para los derrotados, con dos errores además de estos últimos.
Para Erluis Blanco fue la victoria, para Santana su tercer salvamento de la postemporada y para Yoel Suárez, la primera derrota de los play off.
Matanzas no está contra la pared porque la final es a siete encuentros, pero sí está obligado a una remontada al estilo de la semifinal ante Las Tunas. Si podrá repetirla o no, son conjeturas.
El manager Ferrer prefiere mirarlo con el visor del optimismo: “No dejó de ser un gran partido, se llevaron otra vez la mejor parte, tácticamente jugaron mejor. Pero vamos a seguir luchando, se han perdido dos batallas, no se ha perdido la guerra, como mismo pasó con Las Tunas, el equipo tiene que salir a una remontada y el miércoles hay que salir al terreno a ganar, no vamos a desmayar, tenemos que morir con las botas puestas, si es que morimos”.
A pesar de la comodidad de las dos victorias a favor, Carlos Martí parece imperturbable y mira, con objetividad y respeto, lo que tiene delante: “Estos son partidos tensos, este fue un juego difícil, nosotros respondimos a la hora buena, ese es el juego que merece la afición cubana. Pero pensamos que con dos juegos no se ha resuelto nada, tenemos la mitad del camino recorrido, hay que ganar cuatro, ese es un gran equipo, no vamos a pensar en lo que le sucedió a Las Tunas, pensamos en positivo y trataremos de buscar las dos victorias que nos quedan que no va a ser fácil, pero es el objetivo nuestro”.
Saludos cordiales.
Está bien lo de pelota ya ,pero Elsa cuando escribes sobre el desastre en la distribución de la papa ,otraves , una ves más ACOPIO la nota discordante del desafortunado desabastecimiento a la población , que pasa a quien le pedimos cuenta ahora.
Y LA PAPA PA’ CUANDO.
Gracias
Bueno, de verdad que han sido dos buenos juegos, de los cuales Granma há sabido aprovechar cada error de Matanzas, ya sea error con la bola, que tácticos o técnicos, como el no deslizarse en tercera y, el no romper el doble play con la salida para home del corredor.
En el caso de no deslizarse el corredor sí se vió al coach mandándolo a hacerlo, lo que no dió para ver si hizo lo mismo con mandar para home el corredor de tercera. En caso que el coach de tercera no haya recordado al jugador, y no lo haya mandado para home, será que Ferrer debería darle banco? Cosas de la pelota.
Ahora, de la misma manera que han sido juegos que dejan aquél buen sabor, debo apuntar lo negativo. Me refiero a la manera fría, apática, con que está jugando Arruebarruena. No se ve agresivo en el home (y se há tomado 6 ponches), pero a la defensa há dejado mucho que desear al no tirar a bases cuando existía la posibilidad de poner out al corredor, en el primer juego a tercera y ayer a segunda trás el doble de Roel. Si no se siente bien fisicamente, pues que no juegue. Si yo fuese Ferrer lo sentaba y ponía a jugar a Jefferson en tercera y Mujica en el siol.
Arriba, a jugar, que viva el beisbol, que gane el mejor !!.
Saludos.