La movilización democrática, pacífica y civilizada, convocada por el Comité Nacional de Paro en Colombia para el 5 de mayo, inició este miércoles con marchas y bloqueos en las principales ciudades del país suramericano en el marco del Paro Nacional, que inició hace siete días.
Esta jornada de movilizaciones se producen en medio de hechos de violencia en ciudades del Valle del Cauca y Bogotá cuando los cuerpos de seguridad arremetieron en la madrugada contra los manifestantes, además de registrarse varios actos de vandalismo.
El Gobierno local de la capital colombiana informó que son 91 heridos los que se registraron durante la noche en Bogotá, 72 de ellos civiles y 19 policías.
En medio de los disturbios, la empresa TransMilenio cerró de manera anticipada la operación para no poner en riesgo la seguridad de los usuarios, operadores y colaboradores.
Este miércoles en Bogotá se registraron las primeras escenas de violencia en la plaza de Bolívar, donde efectivos del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) de la Policía Nacional realizaron disparos de perdigones contra los manifestantes.
Al respecto, el presidente Nacional de la CUT, Francisco Maltés, afirmó que el Comité Nacional de Paro solo promueve protestas pacíficas en rechazo a las políticas económicas del Gobierno Nacional.
Pidió a la Procuraduría y Fiscalía investigar los videos donde aparecen agentes de la policía cambiándose el uniforme para realizar actos de vandalismo durante las marchas.
Desde la comunidad de Siloé, en la ciudad de Cali, decenas de habitantes inundaron las redes sociales con videos y denuncias de disparos con fuego real y cortes de luz e Internet intencionales para tratar de censurar las transmisiones en vivo de lo que califican de caótica situación generada por la fuerza pública contra personas desarmadas.
Otros videos corresponden a las comunidades de Galán y Bosa Piamonte, este último descrito por Comunes como un verdadero espectáculo del terror protagonizado por la fuerza pública y orquestado por el presidente Iván Duque.
También desde las ciudades de Medellín, Santander, Barranquilla y Bogotá se reportan los ciudadanos en esa red social con imágenes sobre la agresividad del Escuadrón Móvil Antidisturbios y la fuerza pública, mientras otros pobladores reclaman el apoyo de organizaciones internacionales para frenar las agresiones.
Durante las masivas manifestaciones que ha vivido Colombia en la última semana, los enfrentamientos con la Policía y el Ejército se han cobrado un saldo de 19 muertos y 880 heridos, según datos oficiales de la Defensoría del Pueblo. Sin embargo, otras organizaciones sociales aseguran que la cifra es mayor.
La represión de los cuerpos de seguridad contra los manifestantes en Bogotá y en Cali, uno de los puntos neurales de las protestas contra el modelo neoliberal del presidente Iván Duque, ha ido en aumento, mientras se reportan también actos de vandalismo en algunas entidades.
La violencia de la policía y el ejército ha sido condenada por la comunidad internacional, luego que los efectivos han disparado fuego real en varias ocasiones contra los manifestantes.
Siete sindicatos de juzgados y fiscales anunciaron que mañana suspenderán todas las actividades en los despachos judiciales. “Un juez que no tenga la sensibilidad de indignarse por esto, creo que no anda bien”, señaló Asonal Judicial.
“La mayoría de los jueces están indignados de verdad por el trato y la violencia estatal excesiva que se ha presentado contra quienes protestan. Claro que también rechazamos como institucionalidad que se hayan presentado desmanes”.
Son personas que deslegitiman el paro y son una menor cantidad. Así inició su denuncia pública Fredy Machado, en entrevista con El Espectador, presidente de la Asociación Nacional de Funcionarios y Empleados de la Rama Judicial (Asonal Judicial).
Una crisis humanitaria se vive en Colombia a raíz de las políticas neoliberales que han mermado los ingresos de la población, y que se trataban de profundizar con la reforma tributaria, origen de estas nuevas jornadas de protestas, que el Gobierno tuvo que anular.
Este miércoles las marchas se desarrollan en la capital, además de ciudades como en Bucaramanga, Barrancabermeja y San Gil , Medellín, Manizales, Cali, Cartagena, entre otras.
Colombia complejisa su situación interna, por gracia de un gobierno de derecha, rodeado de sicarios como Uribe junto a los escuadrones de la muerte, militares y el apoyo de EU para maltratar, agredir y violar los derechos humanos del pueblo. Máximo responsable el presidente Duke, con una larga lista de acciones irresponsables ante el resto del mundo. Una posición irrespetuosa con las FARC cuyos miembros son hoy asesinados a diario por grupos paramilitares vinculados al gobierno, con lo que se violan los acuerdos de paz. Un asedio constante con la vecina Venezuela y el aumento desproporcionado de fuerzas militares de EU como amenaza de toda la zona, violando el acuerdo tomado en el ceno de la SELAC de hace unos años como zona de paz. Un país que para mantener el abasto de drogas permanente a EU tiene que acudir al asesinato permanente de líderes comunitarios que piden de forma constante al gobierno un cambio total de estas cosas. Ahora de nuevo huelgas del pueblo en medio de una pandemia que ha complicado la situación de un país de los más afectados también por la política irresponsable de este Duke. Esas huelgas ahora, ya no contra la medida retirada de Duke de reformar medidas tributarias sino con alcance mayor lo que refleja el descontento en el pueblo colombiano ante el sistema neoliberal imperante. Esa es la forma en que se profundiza una lucha social como resultado de medidas gobernantes incorrectas y después entonces dicen que es socialismo o influencia de Cuba o Venezuela.