EIDE espirituana muda sus aulas

En medio aún de no pocos sustos y tensiones, cuarentena incluida, la EIDE Lino Salabarría muda sus aulas para reiniciar el curso escolar 2020-2021, en condiciones más que atípicas debido al impacto de la COVID-19 en la provincia espirituana.

Toda vez que la instalación —cuyo propósito era reabrir el martes venidero— funcionará nuevamente como centro de aislamiento para contactos de contagiados por la pandemia, se decidió que los más 800 estudiantes que integran su matrícula se reinserten en las escuelas más cercanas al lugar donde residen de cada uno de sus municipios, a fin de no afectar más el proceso docente-educativo.

Así lo informó Odalis Pérez, subdirectora docente de la EIDE: “Se han hecho las coordinaciones necesarias con Educación para que se inserten según el tipo de enseñanza (primaria, secundaria y preuniversitaria) con los claustros de cada centro. En el caso de todos los estudiantes del municipio cabecera, con una matrícula de 430, se concentrarán en la escuela Ramón Leocadio Bonachea, donde recibirán las clases por parte de los profesores de la EIDE”.

Los estudiantes de la EIDE interrumpieron su proceso docente educativo desde hace más de dos semanas, cuando fueron detectados varios alumnos-atletas como casos positivos a la COVID-19. Un asunto para resolver es cómo mitigar el desfase con el cronograma docente del resto de las escuelas. Los de secundaria recibirán clases en la sesión tarde y primaria y pre en la de la mañana”.

Explicó que en el caso de los que van para los municipios llevan dos semanas de atraso y no deja de ser una preocupación. “De todas maneras seguiremos coordinando el trabajo para que la afectación sea la menor y a los del municipio cabecera los vamos a ir poniendo al día poco a poco, pero lo importante es que no pierdan más clases hasta que la EIDE esté en condiciones de reabrir”.

Roiman Figueredo Toledano, director de la institución, explicó que la prioridad ahora es la parte docente y que la deportiva está detenida, debido también a que todas las competencias a nivel nacional se paralizaron hasta marzo, cuando se esperan nuevas indicaciones.

“Por ello los entrenadores deportivos se vincularán a las direcciones municipales de Deporte y se mantendrán al tanto de los estudiantes que están vinculados a cada una de las escuelas”, apuntó.

En cuanto a la salud de los seis alumnos contagiados por la COVID-19 en las últimas semanas, dijo que se encuentran bien y que los PCR en tiempo real aplicados a las 33 personas (25 de ellos alumnos-atletas) que permanecían aisladas por ser contactos directos dieron negativo

“Esos niños fueron para sus casas donde permanecerán aislados, a la espera de que se les aplique el segundo PCR, allí tendrán seguimiento médico en cada uno de los municipios, en coordinación con las direcciones de deportes de cada territorio”, explicó

Durante toda la pandemia la EIDE ha interrumpido más de una vez su proceso docente-deportivo por servir como centro de aislamiento para contactos de la COVID-19.