El nuevo precio de la leche es para incentivar la producción y buscar el desarrollo ganadero (+video)

Transformar el poco impacto que tienen en Sancti Spíritus las 63 medidas aprobadas por el país para dinamizar la producción agropecuaria, bajo la premisa de medir indicadores y cambiar la mentalidad, devino idea esencial del intercambio de trabajo presidido por el viceprimer ministro Jorge Luis Tapia Fonseca con empresarios, productores y organismos relacionados con el sistema de la Agricultura en la provincia.

A través de un diálogo directo y crítico, sin espacio para las acostumbradas explicaciones y justificaciones, el encuentro dirigió su mirada hacia lo que falta por hacer, a la vez que sembró enseñanzas sobre cómo llegar a las causas que frenan los incrementos productivos y la fluidez de los mecanismos de trabajo, a pesar de que ya están eliminadas las trabas que entorpecían esos procesos.

A propósito del lento avance en la aplicación de las medidas, Tapia Fonseca señaló que “hay falta de gestión de los cuadros, problemas organizativos y de dirección; hay que cambiar la mentalidad, quitemos reuniones y visitemos más al campesino en la finca”.

Con especial interés se debatió el incumplimiento de la producción de leche, renglón donde el país acumula un déficit de 80 millones de litros, de los cuales cuatro pertenecen a la deuda de Sancti Spíritus; de ahí el reciente aumento a 20 pesos por cada litro que el productor entregue a la industria Láctea como nueva medida para buscar mayores niveles productivos y de entrega.

Trascendió que de los 9 535 productores espirituanos que contrataron leche con la industria Láctea, incumplen sus planes 4 096; señalándose como una debilidad que se han visitado muy pocos para conocer las causas de los incumplimientos productivos. Representantes de la Cooperativa de Producción Agropecuaria Juan González, de la Empresa Pecuaria Managuaco, de la Cooperativa de Créditos y Servicios José Martí y un productor individual de Fomento expusieron los resultados y deficiencias alrededor de la actividad.

El nuevo precio de la leche es para incentivar la producción y buscar el desarrollo ganadero, destacó Tapia Fonseca. “Se trata ahora de poner énfasis en la contratación, mucho rigor para que el contrato juegue su papel en correspondencia con la alta erogación que hará el Estado por cada litro de leche, porque de que vale subir el precio y seguir sin cumplir la entrega del alimento”, sentenció el viceprimer ministro.

En el encuentro, Manuel Sobrino Martínez, ministro de la Industria Alimentaria, informó que el Estado va a subsidiar a la industria Láctea la leche destinada a la canasta familiar, se abre la posibilidad de que el productor entregue directamente a la planta el alimento y se trabaja en función de que a partir de marzo próximo el productor cobre diario la leche que entregue.

Una novedad será la contratación individual entre el productor y la industria Láctea en aras de quitar intermediarios en ese proceso. “Los planes antes lo hacían atrás de un buró, ahora el plan y el contrato es con el guajiro y la vaca al frente; pero ver también cuándo pare la vaca, qué masa tiene y todo el control pecuario alrededor de esta actividad”, subrayó Tapia Fonseca.

Acompañado también por Ydael Pérez Brito, ministro de la Agricultura, el viceprimer ministro llamó a todos los organismos que interactúan con los productores a virarse para la tierra, “dar menos reuniones y visitar más al campesino en el campo, es allí donde tenemos que detectar y resolver los problemas”, señaló.

Otros tropiezos relacionados con la actividad ganadera ventilados en el intercambio fueron la necesidad de cumplir con el pago de la leche y de agilizar por parte del banco la entrega de tarjetas magnéticas para que los productores puedan recibir los pagos en divisa por el sobrecumplimiento de sus producciones.

Además de la actividad ganadera, en el encuentro se revisaron otras medidas relacionadas con el Seguro Agropecuario, la comercialización, las tarifas eléctricas y de agua; así como los primeros pasos que da la Agricultura en aras de crear colectivos laborales como alternativa de reducir los trabajadores indirectos a la producción y ponerlos en igualdad de condiciones a otros actores que interactúan en el sector.

Sobre esta particularidad, Tapia Fonseca explicó que “se busca aprovechar esa fuerza para crear colectivos y asumir roles productivos; buscarle trabajo a esa masa de indirectos en función de la producción, la gente sí hace falta, lo que hace falta es más gente en el surco y más técnicos en la base”, destacó.