El recién finalizado enero cerró con una estadística distintiva en la provincia espirituana: no solo resultó el más seco en los últimos 10 años, sino que también concluyó como el menos lluvioso desde 1989, hace ya 33 años.
Según el resumen elaborado por el Grupo de pronósticos del Centro Meteorológico Provincial en el primer mes del año aquí solo cayeron 3.1 milímetros (mm) de precipitaciones, que representan apenas el 8por ciento de la media histórica, por lo que se cataloga como extremadamente seco.
Pero es que de por sí este período resulta bien escaso en lluvias: en el territorio espirituano tiene una lámina media de 39.3 mm, lo que lo convierte en el tercer mes que menos precipitaciones aporta dentro del semestre que comprende el período seco o poco lluvioso del año en Sancti Spíritus.
Aunque también con pocos aguaceros en sus predios, los municipios de Yaguajay, Trinidad y Fomento resultaron los más beneficiados, mientras que los núcleos de máxima lluvia se ubicaron en el Escambray y en la zona de Venegas-Iguará-Perea, con acumulados entre 15 y 25 mm. Por su parte, en el otro extremo, La Sierpe reportó el cero por ciento de su media histórica.
En cuanto a las temperaturas se aprecia que en general mantuvieron un comportamiento ligeramente por encima de la norma para la época, con casi todas las anomalías positivas, excepto la temperatura promedio de la estación de Topes de Collantes.
También se destacan las anomalías de las temperaturas máxima media de la estación de Sancti Spíritus y mínima media de la estación de El Jíbaro que fueron de 1,2 ºC y 1,3 ºC, respectivamente.
Durante enero arribaron a Cuba cuatro frentes fríos y todos transitaron por la provincia con ligeros cambios de tiempo. Este comportamiento hizo que se igualara la media histórica mensual de la provincia que es de 3.6 sistemas, según la Guía Climática del territorio con datos de hace 30 años.
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