En aras de ofrecer un servicio más integral y con estándares superiores de calidad, la Empresa para la Protección de la Flora y la Fauna de la provincia de Sancti Spíritus alista sus instalaciones de cara a la apertura del turismo anunciada por el sector para el próximo 15 de noviembre.
Altamente demandados por los huéspedes nacionales y extranjeros dadas la
belleza de sus entornos naturales y la preservación de sus áreas, los sitios que hoy agrupa la entidad destacan, a su vez, por la combinación de paisajes únicos como el Valle de los Ingenios, en Trinidad, o las Cuevas de Valdés y los senderos de Rancho Querete, ambos en Yaguajay.
María Elvira Dávila, directora de la empresa espirituana, detalló a la ACN que los trabajos de reparación y mantenimiento y la apertura de nuevos
servicios se han extendido a casi todo este territorio central, sobre todo a
la demarcación yaguajayense donde existe una amplia y consolidada red de
instalaciones dedicadas al turismo de naturaleza.
Dijo que en Meneses, poblado en el que funciona un afamado ranchón, una
suerte de parada obligatoria para quienes prefieren la comida criolla, las
labores abarcaron todo el sitio y la ampliación de las opciones; al igual que en la finca agroecológica Soler, uno de los puntos incluidos en el jeep-safari, excursión que nace en los Cayos Santa María y que lleva al visitante a disímiles parajes del centro-norte de Cuba.
Dávila acotó que en Los Álamos, otro de los destinos más importantes de la zona y que tras diferentes acciones constructivas se ha convertido en un complejo mucho más atractivo, se trabaja en la piscina natural, por ejemplo; mientras, en Rancho Querete, quizás el más renombrado de los
lugares de Yaguajay para disfrutar de la naturaleza, se construyó una
estación biológica con cuatro habitaciones, una cafetería y una parrillada.
Pese a que en ese municipio se concentra la mayor parte de los sitios recuperados y ampliados, las labores se han extendido a la Sierra de las
Damas, en Cabaiguán, a la estación biológica de Fomento, y a Lomas de
Banao, en Sancti Spíritus, otro de los lugares pintorescos de la provincia
gracias a su exuberante vegetación, sus especies endémicas y a un servicio
de excelencia.
Por sus valores únicos para el turismo, Trinidad constituye un significativo entorno en la agenda de Flora y Fauna; de ahí que al decir de la directora de la entidad provincial entre los trabajos que se ejecutan allí destaca la restauración de la hacienda El Abanico, uno de los inmuebles patrimoniales ubicados en el Valle de los Ingenios.
Esta es una construcción de 1930 que en un futuro prevé convertirse en un espacio destinado a desentrañar la historia de la ciudad museo del Caribe y del propio Valle de los Ingenios –ambos declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad-, razones suficientes que llevaron a Flora y Fauna a restaurar el edificio, pero respetando siempre sus valores y el de sus piezas.
Al tratarse de un polo turístico con una alta demanda, la intención es crear productos cada vez más diversos y exclusivos, subrayó Dávila.
De acuerdo con textos consultados, El Abanico es el único exponente de la casa quinta en el valle, su planta es muy diferente a la de las casas trinitarias de ese periodo y fue erigida en los terrenos de una antigua fábrica de azúcar.
Tras un año y medio de poca actividad debido a la compleja situación epidemiológica causada por la COVID-19 en la nación, el sector turístico
anunció a inicios de este mes la apertura del turismo internacional, una
medida que se hará bajo los protocolos sanitarios establecidos y que obedece al acelerado proceso de vacunación contra el SARS-CoV-2 que se
desarrolla en el país.
El producto turístico pasajista no se cuestiona las insatisfacciones aparecen en los servicios. Desde la monta de las mesas de los restaurantes de Flora y Fauna así como de los productos que ellos no producen. Llamase bebidas, aguas naturales, refrescos, cervezas, mantequilla, quesos , dulces , café, etc. Por no ser Flora y Fauna una entidad del Ministerio del Turismo.
Si uno disfruta el paisaje paga su peaje o tasa de entrada . Después deseas un almuerzo como Dios Manda. Y chocas con esas carencias gastronómicas. De lo contrario la familia cubana seguirá utilizando las instalaciones de Flora y Fauna como un Campismo. Van de excursión y llevan hasta café en termo.