Hace escasos meses transnacionales del sector de los medicamentos como los laboratorios estadounidenses de Pffizer-BioNtech y Moderna, y la británica-sueca AstraZeneca-Oxford —entre otros— informaron que estaban inmersos de lleno en la lucha por desarrollar candidatos vacunales efectivos contra la COVID-19, los cuales debían estar listos a inicios del 2021.
Aquel anuncio en medio de un crecimiento descontrolado de la pandemia en Europa, Estados Unidos y otras partes, donde ya había provocado cientos de miles de muertes, desató una puja entre un grupo de países ricos por obtener para sí la mayor parte de los nuevos medicamentos, entre los cuales sobresalió la superpotencia norteamericana, que bajo la presidencia de Donald Trump intentó sobornar a un importante laboratorio alemán con el fin de acaparar su producción como parte de su política de América primero.
Como se recordará, por aquellos días Rusia anunció que también contaba con un candidato vacunal de nombre Sputnik V, que ya estaba muy avanzado y cuyas pruebas de las fases I y II habían transcurrido con éxito.
Tan pronto esta información fue conocida en occidente, comenzó de inmediato una campaña para desacreditar el producto del país eslavo, cuyos principales argumentos estuvieron referidos a que era poco serio, que su proceso de desarrollo no había contado con el tiempo necesario y no era diáfano, por lo que podía resultar peligroso para la salud de los inoculados.
Lo mismo ocurrió con China, cuando Beijing anunció que ya tenía prácticamente listas dos vacunas muy promisorias contra la mortal pandemia: la Sinovac y la CanSinoBIO y empezaron las insinuaciones y frases descalificadoras por parte de algunos medios, sospechosos de estar vinculados económicamente con los fabricantes de productos biotecnológicos y farmacológicos de Europa y Estados Unidos.
Fue así que de forma progresiva se fueron incorporando nuevos laboratorios con otros prospectos inmunológicos como los norteamericanos Johnson & Johnson y Novavax, a los que se han sumado otros de diferentes naciones como la India y Alemania, cuando ya avanzaba la vacunación con las vacunas iniciales en la patria de Lincoln, Inglaterra, Israel, Argentina, México, Brasil y otras naciones.
Casi desde el primer momento esta campaña mundial de inmunización contra la COVID-19 ha estado signada por el desespero en la carrera por obtener vacunas por parte de gobiernos acosados por las demandas de sus respectivas poblaciones y por los incumplimientos de los productores, los que han llegado a violar contratos con países y organizaciones internacionales con tal de vender sus productos al mejor postor.
En las primeras semanas de la vacunación masiva, ya en febrero de 2021 se planteó que las vacunas de Pfizer/BioNTech y Moderna, las dos con tecnología de ARN mensajero, tenían tasas de efectividad de 95 por ciento y de 94.1, respectivamente, en tanto la criticada Sputnik V mostraba una eficacia de 91.6 por ciento, según resultados verificados por expertos independientes y publicados en The Lancet.
En esa larga emulación recién iniciada, se conoció que la AstraZeneca-Oxford tiene una eficacia de 60 por ciento, de acuerdo con la Agencia Europea de Medicamentos, pero, además de la alegada eficacia, han empezado a influir otros factores que a la larga pueden resultar decisivos como la inocuidad, la facilidad de manejo y el precio por unidad de cada medicamento.
Se sabe que la producción masiva de determinado artículo incide en la baja en el costo de producción y, por ende, en los precios de venta al por mayor y en este caso la Sputnik V, por debajo de 10 dólares, lleva la ventaja sobre sus principales competidoras occidentales que frisan los 20 dólares por unidad. Mayor aun es la ventaja de las vacunas chinas incluso más baratas que la rusa.
Súmese a esto las noticias acerca de muertes ocurridas entre vacunados con la Pfizer-BioNTech y Moderna, y que ambas deben conservarse a temperaturas de entre 70 y 20 grados bajo cero, respectivamente, mientras a sus competidoras rusa y china les basta con entre 2 y 8 grados Celsius, y se tendrán los indicios acerca de cuales se impondrán finalmente en el mercado.
En esa lucha sin cuartel por la hegemonía de los inoculantes contra la COVID-19 aparecen de un lado los países desarrollados con Estados Unidos y Europa a la cabeza, y las vacunas norteamericanas y europeas, mientras que del otro se sitúan América Latina y el Caribe, África y Asia como escenarios donde empiezan a predominar los productos de Rusia, China y, como comienza a inferirse, pronto se incorporará Cuba.
Esta isla, durante meses ignorada por especialistas e instituciones científicas de occidente, de pronto apareció en el escenario científico mundial, descubierta por publicaciones especializadas inglesas y norteamericanas y medios de prensa como The New York Times, nada menos que con cinco prospectos vacunales, como son Soberana 01 y 02, Mambisa, Abdala y Soberna Plus, dos de ellas —Soberana 02 y Abdala— en plena fase tres de los protocolos de certificación final.
En este contexto acaba de aparecer el lunes 8 de marzo un reporte de Prensa Latina según el cual la académica británica Helen Yoffe valoró como una noticia esperanzadora para los países de menos recursos, el hecho de que Cuba tenga casi a punto varias vacunas contra la COVD-19.
“Es como si de pronto se dieran cuenta de que Cuba tiene una industria biotecnológica increíble y de nivel mundial”, comentó la experta en temas cubanos y latinoamericanos. De acuerdo con la profesora de Economía e Historia Social de la Universidad de Glasgow, el tema cobra importancia especial tras reportes de que la empresa estadounidense Pfizer le exigió a Argentina, Brasil y otros países la entrega de activos soberanos como pago colateral por su vacuna contra la Covid-19, expresa la agencia.
De momento Sputnik V y las vacunas chinas están compartiendo el mercado con sus homólogas estadounidense y británica en Argentina, Brasil, México, Perú y otras naciones de este continente donde tienen las de ganar por sus precios y pocas exigencias de conservación, además de la disposición rusa y del país asiático de producirlas fuera de su territorio.
Así las cosas, se conoció este lunes en un trabajo de José Llamos Camejo, publicado en el periódico Granma, que en el mundo se trabaja en 308 candidatos vacunales, 81 de ellos en ensayos clínicos y 16 en fase III, sin contar a Soberana 02 y Abdala. Del total, 15 vacunas cuentan ya con registros sanitarios o autorización de uso de emergencia, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Hasta el 4 de marzo, expresa el reportaje, en el mundo se habían administrado 284 millones de dosis de vacunas, y 166 000 000 de individuos de 81 países habían recibido al menos una dosis, mientras que solo 60 millones de ciudadanos de distintas nacionalidades completaron el ciclo de inmunización, lo que representa menos del 1 por ciento de los habitantes del mundo.
PASTOR, mi critica a la Ofensiva Revolucionaria de 1968 esta basada unicamente en la expropiacion forzosa y no en otros elementos de defensa que Ud comenta en su respuesta.
Debatir con respeto, aunque estemos en esquinas opuestas, es beneficioso para el buen periodismo. Le agradezco, Pastor, que se haya sumado al debate y nos haya dejado opinar libremente. Un saludo cordial.
Pastor, da pena y verguenza que Ud politice un tema como las vacunas que nada tiene que ver con politica. Claro que la URSS no existe y que su heredera Rusia es capitalista desde 1991. El asunto es que para sacar una vacuna al mercado nacional o internacional, hay que pasarla por 3 fases de pruebas. No es un protocolo mio ni suyo, sino de la OMS; ademas de publicar cada ensayo en una revista científica internacional. Y Rusia se salto “a la torera” la Fase 1 y la Fase 2. Y Ud tratando de justificar semejante locura. Por esa razon tan importante es que destacados científicos no la recomiendan. Opacidad y falta de transparencia de los rusos.
Y como mis criterios no son políticos, voy a deshacerme en elogios con la vacuna china que publico las 3 fases, como exige el protocolo de la OMS. Esta recomendada por Virologos e Infectologos del mundo entero, incluyendo los de países capitalistas que Ud tanto ataca.
Más importante que la publicación o no de los datos acerca de las pruebas en territoiro ruso de la Sputnik V es su eficacia y conveniencia para los países que la necesiten, lo que está demostrando en la práctica la vacuna rusa. De otro lado no soy yo quien politizó desde el primer momento el tema de las vacunas contra la Covid-19, sino las grandes transnacionales de occidente apoyadas por el ex presidente Donald Trump. Si ataco a los países capitalistas desarrollados es que, además de politólogo, soy historiador y he venido siguiendo el día a día de la actuación internacional de esas naciones desde siglos pretéritos y que le conste, Samuel, hay motivos más que sobrados para repudiarlos. Pongamos el más recidente caso: el arreciado y oportunista bloqueo de los Estados Unidos contra Cuba. ¿Cómo no voy a odiarlo y repudiarlo, si me hace un yogurt la vida cotidiana? Además, ¿por qué EE.UU. ha desoído los llamados de la ONU, del Papa y de otras instancias y personalidades a no utilizar el arma de las sanciones económicas contra otros países en tiempos de pandemia? Gracias.
Fe de erratas..Quise escribir Viet Nam,que por cierto sus avances económico después de una devastadora guerra han sido extraordinario combinando,como China la empresa estatal con la privada en un marco de competencia
El problema, José Luis, es que pese a los 150 años de transformaciones que usted menciona, lo cierto es que, en esencia, el trasfondo es el mismo, con los monopolios de occidente peleándose por aplastar a sus competidores. ¡Ah!, ¿que hay grandes empresas rusas y chinas y de otros ex socialistas compitiendo en el mercado?. Bueno, ¿EE.UU. y sus socios occidentales no hicieron todo por derribar el socialismo en el antiguo campo socialista?, pues ya no son socialistas y cuentan con empresas fuertes y competitivas al igual que ellos. ¿qué esperaban? Hoy valen mucho todavía los aportes de Lenin sobre la entraña brutal e inhumana del capitalismo, cuya fase superior es el imperialismo y, de otro lado, también conservan plena vigencia muchos de los principios enunciados por Marx en su enjundiosa obra.
Es su opinión tan válida como la mía..Pero preguntase dónde vive mejor la clase trabajadora.Bajo el monopolio estatal de Corea del Norte o bajos los «Monopolios» capitalista de Corea del Sur..Si el bienestar del pueblo trabajador era el fin último de Lenin y Marx..a quien preferiría?
Mire, José Luis, en realidad lo que dice sobre Vietnam y su desarrollo es cierto, pero, ¿está acaso bloqueado ese país? Vietnam contó con la inversión masiva en su economía de entidades de Japón, China y otras poderosas economías mundiales, incluido Estados Unidos. He notado que, como por arte de magia, usted y los que piensan igual, con la ideología del enemigo al que no tememos desafiar, hacen abstracción total del bloqueo que cada año nos cuesta entre 4000 y 5000 millones de dólares, lo que ha sido factor principal que frena nuestro desarrollo. ¿Cómo no se da cuenta y hace la vista gorda ante ello?
Y no ha transcurrido suficiente tiempo y miles de millones de la antigua URSS,China,antiguo bloque socialista, Venezuela etc,para habernos desarrollado sin necesidad de los USA?..No le parece que se administro muy mal o el sistema de monopolio estatal no funciona
Lo que pasa, José Luis, es que cuando mejor avanzábamos en la década de los años 80 del pasado sglo, se desmorornó el campo socialista europeo y la antigua URSS y entonces, de manera muy oporunista como siempre, Washington redobló el bloqueo. He escuchado supuestos argumentos según los cuales Cuba debe olvidarse de los EE.UU.y comerciar con otros y ya. ¡Que ignorancia! Si solo se tratara de ello. Lo que ocurre en realidad es que las leyes Torricelli de 1992 y especialmente la Helms Burton de 1996 son extraterritoriales y aplican el principio del perro del hortelano que ni come ni deja comer. EE.UU. chatajea a lo descarado a otras naciones y a empresas extranjeras para que no comercien con Cuba y esos gobiernos y sus entidades se bajan los pantalones y se ponen de espaldas ante el yanqui todopoderoso, engreído y prepotente. Por eso no nos hemos podido desarrollar. Pero, ¿por qué no mira usted en derredor y ve los casos de otras naciones latinoamerianas y caribeñas?. Compáre a Cuba con ellas, que no están bloqueadas y tendrá la mejor respuesta.
Pastor admite que Cuba vivia de la limosna sovietica y los paises del Este ( Alemania, Polonia, Hungria, Bulgaria, Rumania y Checoslovaquia ) . Probablemente Ud fue uno de los muchos que aplaudieron la expropiacion masiva de Marzo de 1968, mediante la Ofensiva Revolucionaria. Cerraron todos los medios de produccion privados que aportaban comida y bienes de servicio al pueblo ( Bodegas, Cafeterias, Restaurantes, Guaraperas, Heladerias, Caaros de Fritas, Dulcerias, etc; etc ) . De 1968 a 1972 en Cuba hubo hambre y miseria en nuestras cocinas producto de esa expropiacion masiva, irresponsable y sin sentido. El lento retorno a la actividad comercial privada iniciada por Raul Castro entre el 2007 y el 2018, solo ha demostrado que nunca se debio expropiar a los productores de comida, bienes y servicios porque aportaban el sustento del pueblo. Hoy miramos a la Ofensiva Revolucionaria de 1968 como un rotundo fracaso.
No María, no lo admito porque nunca el comercio de Cuba con los países socialistas fue una bicoca u obsequio con ventajas de un solo lado para Cuba, ya que nuestros productos como el azúcar, el tabaco, el ron, el café, la torula, nuestros alcoholes finos y una larga lista de otros productos exportables, valian tanto y valen como pudieron valer los que ellos nos enviaban. Cuba, por ejemplo, Cuba adquiría tecnología en parte ya obsoleta en occidente, por necesidad y como parte del intercambio a que nos obligaba el bloqueo. Y esa era beneficioso para ambas partes. En cuanto a la llamada Ofensiva Revolucionaria de 1968 nunca estuve de acuerdo con ella, la critiqué y la critico y coincido con usted en llamarla un error propio de la construcción del socalismo en un momento dado de su aplicación en nuestro país.
Pero esa Ofensiva de marras, que usted y yo creemos errónea, y que se rectificó 45 años después, no puede opacar la inmensa obra revolucionaria por la manumisión de los cubanos, su salud, su educación, su cultura, su desarrollo deportivo y en otras áreas, como es la biotecnología, la ingeniería genética y las ciencias en general. En cuanto a financiación o regalo podíamos preguntar: ¿Quién pagó el armamento y entrenamiento de los mercenarios en Girón y de los alzados C/R a inicios de los años 60 en Cuba? ¿Quién les paga a los mercenarios actuales que quieren derrocar a la Revolución en el momento de su más alto nivel de institucionalización? Sí, ya sabemos: la NED y el Gobierno de los EE.UU., que financia a las ONGs y otras organizaciones que nos atacan. Gracias, María.
Gracias por responder y le agradezco sinceramente el que haya debatido conmigo,.Por el estilo en que escribe,opino que es UD el autor dell articulo,ojala que este tipo de intercambio existiera en todos los aspectos de la vida espirituana,pero el hecho de que se publiquen opiniones que difieran de la oficial me da esperanza de que podemos construir una patria ¨»Con todos y para el bien de todos» porque pretender que todos pensemos igual seria lo mismo que prtender que a todos nos guste la misma mujer,hombre,comida,musica,religion,deporte etc
Me satisface mucho conversar con personas abiertas al diálogo y reconozco que uno difiere de manera cotidiana hasta con lo más querido para cada persona, como los hijos, la compañera o compañero de vida, y los padres, en el dichoso periodo en que uno los tiene en este mundo. De manera que su mensaje me estimula. Gracias, José Luis.
Llamar capitalismo monopolista y desconocer la dura competencia entre las transnacionales en todas las ramas de la economía y entre estás transnacionales y las empresas estatales como por ejemplo en China o Viet Mal es ignorar la economía actual e implantar el «Capital» de Marx en las relaciones económicas actuales pasándole por arriba a 150 años de transformaciones..Por cierto no dice nada de la economía de monopolio estatal dónde la competencia es casi nula y sus resultados económicos están a la vista
Sigue la omision, no se si por descuido, pero lo cierto es que Rusia no publico nada de la primera y segunda fase de su vacuna, como exige el protocolo de la OMS: en ninguna revista cienfitica, incluyendo THE LANCET, que es la mas prestigiosa. Claro que los Virologos e Infectologos dieron la voz de alarma y se llevaron las manos a la cabeza por tan descabellada idea. Tenian razon en descalificar a la vacuna rusa
Samuel, una sola pregunta. ¿por qué tenían razón ciertos virólogos de infectólgoos al descalificar la vacuna rusa, que había sido anunciada con tiempo suficiente por los laboraorios Gamaleya? La práctica ha demostrado que es segura, eficiente y barata y más fácil de conservar y transportar y por tanto ¡No tenían razón en descalificarla!. ¡Otra pregunta: ¿Si ya en Rusia no hay comunismo, por qué siguen usted y los que piensan como usted atacando a ese país como en los tiempos de la antigua URSS? Todo parece indicar que es para hacerle el juego a Washington y la Europa otaniana. En un final lo que quieren es debilitar y desmembrar ese inmenso país para luegto apoderarse de sus colosales recursos. como en su tiempo pretendió Hitler y le costó la vida.
Las mentiras de Pastor solo las creen quienes no tienen opcion de leer otrta prensa que no sea la cubana. La India ya termino las 3ra fase de su vacuna y ya tiene la aprobacion para exportarla, por cierto, mucho mas barata que la rusa y la China respectivamente.
Lo que es una verdadera verguenza es que la ONU esta donando vacunas a paises pobres y Cuba no ha solicitado ni una sola dosis. Mientras esperan por sus vacunas todavias en proceso, mueren cubanos todos los dias por esa indiferencia e indolencia de su sistema sanitario.
La emprobrecida Haiti, ya tienen vacunada el 30% de su poblacion y la potencia medica de Cuba no tiene ni un solo inmunizado. Esto no lo cuenta Pastor.