¿Se escribe Mipymes o mipymes? Echemos un vistazo a la normativa ortográfica vigente respecto de este tipo de voces.
Existen siglas tanto para nombres propios como para nombres comunes o expresiones equivalentes. Asimismo, hay siglas que se pronuncian deletreando cada uno de sus constituyentes, y las hay que se pronuncian en sílabas, como cualquier palabra de la lengua.
Las siglas que se pronuncian por deletreo se escriben en mayúsculas, no importa si designan nombres propios (CDR, CTC, EJT, DTI) o si designan nombres comunes: TV (televisión), MLC (moneda libremente convertible), FM (frecuencia modulada)…
Son las siglas que se pronuncian en sílabas, llamadas acrónimos, las que generan dudas ortográficas.
De manera general, los acrónimos que designan nombres propios se escriben solo con la mayúscula inicial si tienen más de cuatro letras: Oficoda, Icaic, Uneac, Cujae. Aunque no es una regla, cuando posee cuatro o menos letras, será preferible escribirlo todo en mayúsculas, según el consejo de la Ortografía de la lengua española (OLE), supongo que por meras cuestiones estéticas, en virtud del escaso cuerpo gráfico de tales voces: compárese UPEC, MES, FEU con Upec, Mes, Feu, y se comprenderá la diferencia. En otras ocasiones, se evita por la necesidad que habría de aplicar las reglas de acentuación, y las formas notoriamente distintas que de ello resultarían: son los casos, por ejemplo, de Mincín, Otán o Esbú, que llevan tilde.
Por su parte, los acrónimos que designan nombres comunes deben escribirse enteramente en mayúsculas, salvo que, por su mucho uso, hayan terminado convertidos en palabras, es decir, se hayan lexicalizado. En tal caso se escriben íntegramente en minúsculas: tac (tomografía axial computarizada), uci (unidad de cuidados intensivos), sida (síndrome de inmunodeficiencia adquirida), ovni (objeto volante no identificado)…
A veces, como en TIC (tecnologías de la información y la comunicación) o COVID (Coronavirus Disease), este proceso de lexicalización tarda en ser reconocido por el Diccionario académico y los manuales de estilo de casas editoras y medios de prensa; en consecuencia, su escritura en minúsculas alterna, en un momento dado, con la otra forma (COVID ~ covid), o no tiene éxito, como la forma tic, a la que se ofrece resistencia ―dice la Fundación del Español Urgente― por su homonimia con tic ‘movimiento convulsivo, que se repite con frecuencia, producido por una contracción involuntaria de uno o varios músculos’.
¿Qué pasa con mipyme?
Es el acrónimo de una expresión equivalente a un nombre común: micro-, pequeña y mediana empresa. Aunque mipyme es un vocablo novedoso para los cubanos, y brilla por su ausencia en el Diccionario de la lengua española ―donde sí aparece pyme (pequeña y mediana empresa)―, en el Corpus del español del siglo XXI se atestigua su uso desde inicios de este siglo en casi todos los países latinoamericanos.
Dicho esto, se infiere que resulta erróneo, como se ve en nuestra prensa, escribir Mipymes, con mayúscula inicial, el plural de mipyme. Porque no es un acrónimo que equivalga a un nombre propio, como Minsap (Ministerio de Salud Pública) o Etecsa (Empresa de Telecomunicaciones de Cuba, S. A.). En todo caso, lo que cabría sería MIPYME, como un acrónimo no lexicalizado, sin la –s del plural, aunque se pronuncie, pero ya vimos que por el arraigo y la extensión geográfica de su empleo se puede considerar una palabra española con todas las de la ley, y lo idóneo es escribir mipymes, enteramente en minúsculas.
Buenísimo ese artículo, muy esclarecedor. Felicitaciones a tan laureado escritor, autor del artículo de referencia. Profunda investigación tuvo que realizar para darnos a conocer, cómo se escribe mipymes, que incluso, al tratar de escribir este comentario, un corrector automático predeterminado, lo pone en Mayúscula, jajaja….esto ratifica, la equivocación generalizada, que existe en la escritura de este acrónimo. Muchas Gracias.