Cuando el Inder nació hace 60 años, la provincia de Sancti Spíritus era una utopía geográfica. Por eso, para un territorio que tuvo que arrancar casi de cero en materia deportiva, las marcas del desarrollo de esta rama llevan aquí el sello de lo autóctono.
De un nacimiento que debió heredar la escueta fuerza técnica y deportiva formada en provincias colindantes con escasas instalaciones, la tierra del Yayabo comenzó a agenciarse su propio ejército, integrado hoy por más de 3 880 trabajadores, de ellos 1 622 ligados a labores docentes o vinculados a la práctica del deporte, la cultura física o la recreación.
Ello permite que más de 189 000 espirituanos de todas las edades —más del 30 por ciento de la población— figuren como practicantes sistemáticos a través de los diferentes programas y proyectos del sector, lo cual habla a favor de una buena calidad de vida, facilitada por la concepción del deporte para todos.
Aquí se incluyen los 580 profesores de Educación Física vinculados a los cerca de 380 centros educacionales, los 458 que impulsan la actividad física comunitaria y los 95 de la recreación, a los que se une la contribución indispensable de los más de 4 000 activistas que desde la voluntad y el amor permiten el desarrollo del sector.
El crecimiento no ha sido solo cuantitativo. Las posibilidades para el desarrollo científico son exponenciales tal como lo ilustran los 1 540 licenciados en Cultura Física con que cuenta la provincia, los 450 técnicos, 255 másteres, 11 doctores y 17 especialistas.
En este salto tiene un impacto vital la existencia de 23 combinados deportivos, diseminados por todo el territorio, incluidos varios en zonas de difícil acceso y en áreas del Plan Turquino.
Un indicador que muestra el desarrollo del Inder en el territorio es la creación de una sólida infraestructura con la construcción de 538 instalaciones (228 del organismo deportivo, 269 de Educación y 131 de otras entidades) con impacto en todos los municipios y algunas de ellas referentes, como las salas Yayabo y Yara, el estadio José Antonio Huelga y la Academia de Tiro con Arco.
Ello ha permitido que esta provincia se haya convertido en sede de importantes eventos nacionales e internacionales de alta jerarquía, distinción reconocida a nivel de país.
Un momento que marcó un punto de giro importante fue la creación de la EIDE Lino Salabarría hace casi 40 años, emporio esencial para la forja de talentos deportivos y desde donde cada año se logra mantener un flujo sistemático hacia los centros de alto rendimiento y la consecuente representatividad de nuestros atletas en los eventos más encumbrados en los que participa Cuba.
Tanto es así que en los últimos cinco años se han promovido anualmente, como promedio, unos 80 talentos, muchos de los cuales han logrado ascender como primeras figuras en cada uno de sus deportes como la tiradora Eglys de la Cruz, el canoísta Serguey Torres, el luchador Reineris Andreu, el boxeador Yosbany Veitía, y en otros momentos también lo fueron la campeona mundial Yumari González, de ciclismo; el titular universal Yoelvis Quesada, de triple salto, y la doble campeona del orbe Taimaris Agüero, de voleibol.
El aporte de la EIDE, así como de las cuatro academias múltiples del territorio y el más reciente nacimiento de la Escuela de Profesores de Educación Física, unido al desarrollo de los municipios permiten que en la provincia se practiquen 34 deportes (excepto dos de los que se materializan en el país).
Hoy, a pesar de las insatisfacciones lógicas que aún quedan, Sancti Spíritus ha logrado desbancar varios fantasmas fatalistas que en algún momento la condenaron a “flotar” en los puestos de retaguardia del país en la mayoría de los deportes por su condición de provincia naciente, cantidad de habitantes, etc.
Varios datos ilustran el salto. En los últimos dos años se han alcanzado los mejores resultados históricos como provincia en el deporte a nivel nacional: séptimos lugares inéditos en la categoría escolar y la juvenil, un sexto integral en el 2019 y un cuarto general en el 2020.
La fecha por el aniversario del Inder encuentra a toda la familia del deporte, incluida la espirituana, en un escenario atípico, marcado por la COVID-19 que le ha cambiado a este sector su andar habitual.
No obstante, lo importante son las vías que se explotan para reinventarse movimientos diferentes para mantener viva la vitalidad del deporte en tiempos de pandemia.
Querida Elsa y amigos lectores
Comparto las opiniones ofrecidas en tu articulo y no quiero dejar de expresar que, gracias a ti y a tus excelentes reflexiones, la población de la provincia y los que somos espirituanos y vivimos en otros territorios, como en mi caso que vivo hace ya muchos años en la Habana, pero sin dejar de pasar un solo sin leer la versión digital de Escambray, nos mantenemos informados de lo que acontece en nuestra querida provincia y creo que, en esta afirmación, expreso el sentir de muchos lectores.
Sin embargo, hay un tema que forma parte del deporte y que sé que, ocasionalmente, lo aborda tu colega la compañera Xiomara, considero que aun así no debía estar ausente en tu agenda de publicidad deportiva y me estoy refiriendo concretamente al deporte de los trabajadores de la ganadería, es decir, el rodeo que tantas motivaciones y seguidores tiene, no solo por los trabajadores de las empresas ganaderas y las cooperativas, sino también, por la población a instancia de los Municipios, los bateyes y hasta en los barrios rurales y de esto no se habla nunca, solo se hace uno o dos artículos coincidiendo con la celebración de la feria provincial en el recinto «Delio Luna Echemendia» y esta falta de información sistemática no me parece correcta y hace un tremendo daño en el desarrollo de este deporte que, aunque no se divulga, existe y se disfruta los fines de semanas en varias pistas de rodeos que con recursos propios y la iniciativa de los propios vaqueros existen con actividades para el disfrute local y en cambio este humilde y a la vez encomiable esfuerzo no se reconoce, ni se divulga.
Es probable que cuando leas este comentario, pienses que si me he vuelto loco para insertar este tema en un artículo que tiene otro objetivo y por lo tanto, te ruego disculpas, pero no encuentro ningún otro espacio apropiado para abordar la importancia del deporte de la ganadería y de que el mismo tenga una cobertura publicitaria que puede tener como fuente primaria de información los corresponsables que existen a instancia de los municipios y estoy seguro conocen de lo que ocurre con este movimiento a instancia de la base, luego se trata de organizarlo y sistematizarlo sin incurrir en gastos y/o esfuerzos adicionales a los que normalmente realizan nuestros medios de prensa para mantener informada a la población y en cambio te aseguro, sin temor a equivocarme, de que insertar este deporte en la información escrita, radial y televisiva de la provincia constituirá un tremendo reconocimiento y estímulo a las decenas de trabajadores de la ganadería que practican el mismo y cuyo esfuerzo jamás se ve reconocido ni material, ni moralmente a ninguna instancia, porque sencillamente funciona por pura espontaneidad y esfuerzo de los propios vaqueros sin disponer de ningún apoyo por parte del Ministerio de la Agricultura y demás organismos en los territorios y al mismo tiempo constituirá el aporte de un granito de arena de la prensa en el desarrollo de este deporte y en la captación de talentos que a la postre formaran parte de la selección provincial.
No quiero terminar, sin recordar que al producirse la muerte del inolvidable GUATAVO AREAS, quien fue gloria del deporte del rodeo en Sancti Spiritus y a nivel del País, primero, como vaquero activo extraclase y después, como director de rodeo de la provincia de Sancti Spiritus durante más de 20 años y que en su sepelio tuvo una merecida despedida de duelo con la población en la calle por donde transito su féretro y no quiero pensar que este abnegado y ejemplar deportista ya no se recuerde y que su historia ha pasado al olvido y lo digo porque, coincidiendo con su funeral, varios compañeros, amigos y dirigentes de la agricultura y de esto puede dar fe nuestra querida y admirada Xiomara, se propuso bautizar la pista de rodeo con el nombre de GUSTAVO AREAS en justo homenaje a un hombre que lo hizo y lo dio todo por el deporte del rodeo y que no es solo orgullo de los trabajadores de la ganadería, es de la ciudadanía espirituana porque forma parte de sus raíces culturales y tradiciones más autóctonas de nuestra querida provincia y como que esta idea no puede limitarse a los funerales de Gustavo, me tomo el atrevimiento de solicitarte una ayuda en encaminar y concretar este merecedor reconocimiento compartiéndolo con las autoridades del partido, el gobierno y el ministerio de la Agricultura de la provincia.
Ruego disculpas a mis colegas lectores por introducir este tema, pero realmente lo considero una necesidad moral y revolucionaria en el contexto de la actividad del deporte en Sancti Spiritus.
Elsa, creo que en tu escrito faltó un nombre que para mi entender no puede faltar cuando se hable de desarrollo deportivo espirituano en cuanto a infraestructura y deportista se hable: Heriberto Moreno.
Discrepo. Desde hace mucho pero mucho tiempo. Sancti Spiritus se ha ganado un lugar en el Deporte Cubano. No ahora en tiempo de COVID que es provincia BURBUJA. No había evento deportivo que de perdiera en Cuba. Que iba a recalar a Sancti Spiritus. Aunque no aportaba atletas. Aportaba comida y alojamiento para los concentrados. La maldita CONDICION de ser provincia a la mitad del camino. Y está historia se reconoce muy poco. O los que la tienen que recordar. Son diplomáticos en los vaivenes de sobrevivir en la burocracia.