Las megaelecciones realizadas este fin de semana parecen haber mostrado que efectivamente Chile cambio, tal como expresaban muchos ciudadanos durante la revuelta popular que estalló en octubre de 2019.
Las urnas le dieron una preferencia evidente a las fuerzas del cambio encabezadas por la izquierda y a los independientes, mientras la coalición de derecha y los partidos de oposición de tendencia socialdemócrata resultaron los grandes derrotados.
Cerca de las 23:00, hora local, aún sin conocerse los resultados finales el presidente Sebastián Piñera expresó en alocución desde el palacio de La Moneda que ‘no estamos sintonizados con la ciudadanía y estamos siendo interpelados’.
El mandatario admitió así la contundente derrota del oficialismo y los partidos tradicionales en la elección de constituyentes, gobernadores, alcaldes y concejales.
Señaló que ‘la ciudadanía nos ha enviado un claro y fuerte mensaje al Gobierno y también a todas las fuerzas políticas tradicionales’ al optar por nuevos liderazgos, y expresó que ‘es nuestro deber escuchar con humildad y atención el mensaje de la gente’.
En la muy importante elección de Constituyentes, la derecha, que se presentó con una lista única, quedó lejos de obtener un tercio de los 155 escaños de la Convención Constitucional como indicaban los pronósticos preelectorales.
Ese resultado abre posibilidades a que la nueva Constitución pueda plasmar los cambios reclamados por millones de chilenos en las calles.
Pero también otros resultados a los cuales estaban atentos los analistas marcan sustanciales transformaciones en el panorama político del país.
Así, la región de Valparaíso, la segunda más importante del país, se convierte en un bastión de la izquierda, al resultar elegido gobernador por amplio margen Rodrigo Mundaca, destacado dirigente social.
En esa región, además, Jorge Charp fue reelecto alcalde de Valparaíso, mientras en Villa del Mar, dominio tradicional de la derecha, obtuvo la alcaldía Makarena Rivamonti, ambos del frente Amplio.
En esta capital, tal como se esperaba, Damiel Jadue fue reelecto en la alcaldía de Recoleta con más del 64 por ciento de los votos, lo que a juicio de analistas constituye un sólido aval como candidato presidencial del Partido Comunista.
Asimismo, en la Región Metropolitana la gobernación será discutida en segunda vuelta por Claudio Orrego de la Democracia Cristiana, y Karina Oliva, respaldada por los comunistas y el Frente Amplio, desplazando a la derecha.
Además, los grandes ganadores en muchos cargos fueron los candidatos independientes, a los cuales analistas políticos daban muy pocas probabilidades y en cambio recibieron un contundente respaldo de la población.
Este es el comienzo en el camino de las grandes alamedas por dónde transitara el hombre nuevo como dijo en una ocasión Salvador Allende. Chile empieza a demostrar la realidad escondida durante años de Neoliberalismo, Pinochetismo y Carabinerismo. Llama la atención como los jóvenes han jugado un papel destacado en el cambio. Si son inteligentes los partidos tradicionales de izquierda deben unirse y aportar más en este cambio político.