La celebración del tercer Consejo Conjunto Cuba-Unión Europea (UE) ratifica la voluntad de ambas partes de fortalecer sus relaciones y consolidar el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación, afirmó el canciller cubano, Bruno Rodríguez.
El ministro de Relaciones Exteriores encabezó la delegación de la nación caribeña que participó este miércoles en dicho encuentro, realizado de forma virtual, y que contó por la parte europea con la participación del alto representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell.
El jefe de la diplomacia cubana destacó en las palabras de apertura las circunstancias especialmente complejas que vive el mundo debido a la pandemia de COVID-19, a pesar de lo cual ambas partes reconocieron un avance en sus relaciones bilaterales y de cooperación en el último año.
Reiteraron, asimismo, la disposición a continuar trabajando por el fortalecimiento de estos lazos, señala una nota de la cancillería.
Rodríguez resaltó que la celebración del tercer Consejo Conjunto evidencia la voluntad de cumplir los compromisos previamente acordados y consolidar el Acuerdo de Diálogo Político y Cooperación (ADPC), como marco regulatorio de las relaciones bilaterales.
Expresó la convicción de que ‘es posible construir espacios para el diálogo y la cooperación en beneficio mutuo’, basados en el respeto y potenciando los elementos que los unen.
El canciller añadió que ‘las relaciones entre Cuba y la Unión Europea avanzan hacia su consolidación’ y reafirmó el compromiso de su país de trabajar para preservar y consolidar la relación creada en esta última etapa.
El alto representante para Asuntos Exteriores de la UE, por su parte, abordó igualmente el buen estado de las relaciones bilaterales y exaltó la importancia de las acciones de cooperación llevadas a cabo en este periodo, las cuales incluyeron el apoyo a la isla en el enfrentamiento a la Covid-19.
Ratificó el respaldo del bloque europeo a la resolución cubana contra el cerco económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos, así como su oposición a la aplicación de los Títulos III y IV de la Ley Helms-Burton.
Borrell reiteró también el rechazo de la UE a la inclusión de Cuba en la lista de países que supuestamente patrocinan el terrorismo, elaborada de forma unilateral por el Departamento de Estado norteamericano.
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