¿Son los bebés quienes lactan o son sus madres las que los lactan?
El verbo lactar se refiere tanto al acto de amamantar como al de mamar. Así, en un texto publicado en la Revista Cubana de Enfermería hace unos años se habla de «madres que lactaron adecuadamente» y de «niños que lactaron por un tiempo corto».
Esta peculiar reversibilidad en los argumentos del verbo lactar no es exclusiva del español de Cuba; se da en todo el mundo hispanohablante.
Ahora bien, hay una marcada preferencia por usar este verbo con el significado de ‘amamantar’. En estos casos puede llevar complemento directo («Los padres prefieren dormir en la noche y no lactar al bebé», Juventud Rebelde) o prescindir de él («se presentan también deficiencias de micronutrientes, que pueden estar presentes en las madres que lactan», Revista Cubana de Pediatría).
En cambio, cuando significa ‘mamar’, rehúsa la predicación con objeto directo («solo el 48 % de los niños y niñas lactaron en la primera hora de haber nacido», Granma). A veces, raramente, el verbo recibe complementación de un sintagma encabezado por la preposición de, indicativo de origen o fuente («lacta normalmente del seno materno y se desarrolla con normalidad», Hoy, medio de prensa dominicano).
La confluencia de significados inversos las hereda lactar del verbo latino lactare, que llegó a tener ambos, ‘amamantar’ y ‘mamar’, aunque hubiera otro verbo, lactere, exclusivo para ‘mamar’. Según señala Vicente Salvá, ninguno se usó mucho, salvo en el participio de presente, lactans, lactantis y lactens, lactentis.
Al parecer, siguiendo el modelo de lactans, lactantis, surge lactante, voz que mayoritariamente se utiliza para designar al bebé de pecho, pero que también puede referirse a la madre que lo amamanta. Es por eso que de vez en cuando escuchamos o leemos bebé lactante y madre lactante, para eliminar la posible ambigüedad.
Este curioso fenómeno, en el cual una palabra o locución tiene significados que se oponen, es conocido como enantiosemia o autoantonimia. Se ve en alquilar y arrendar (que designan lo mismo ceder temporalmente un bien por dinero que adquirirlo), dar clase (impartirla como profesor y recibirla como alumno), nimio (insignificante, pero también excesivo, exagerado), etcétera.
Es muy recurrente escuchar a algunas figuras publicas referirse a su publico como mexicanos y mexicanas, venezolanos y venezolanas. Quisiera su opinion al respecto.
Gracias Pedro. Un gran placer leerte . Mucha enseñanza en cada : En la punta de la lengua.