La Tarea Vida, concebida por el estado cubano para enfrentar las consecuencias del cambio climático, evidencia algunos avances en la provincia espirituana, sobre todo en las áreas priorizadas de la Empresa Agroindustrial de Granos Sur del Jíbaro, donde con acciones de manejo del agua se ha logrado retroceder la intrusión salina unos 8 kilómetros con respecto a 1983.
Según trascendió en el último encuentro del Buró provincial del Partido, aquí además se han realizado estudios para la obtención y generalización de variedades de cultivos más resistentes, y sobre la factibilidad para el vertimiento de arena y el mejoramiento de las payas Ancón y María Aguilar.
Igualmente, se aprecian progresos en la protección de los suelos, la reforestación de cuencas hidrográficas, la disminución de vulnerabilidades en los viales y puentes, así como en el uso de energías renovables y la construcción de viviendas con mejores tipologías.
Sin embargo, a pesar de estos innegables resultados, en el encuentro de la máxima dirección política del territorio también se evaluaron algunas dificultades en la ejecución de determinadas acciones previstas, sobre todo en el sistema de acueducto y alcantarillado de Trinidad, debido al déficit de financiamiento y de recursos materiales; y en el reasentamiento planificado para los poblados de Tunas de Zaza y El Médano —amenazados por las penetraciones del mar—.
En este sentido, hasta el 2021 se había planificado la entrega de 80 viviendas y hasta la fecha no se ha construido ninguna por el déficit de recursos materiales existentes en la actualidad, que ha obligado a reprogramar esa cifra: ahora solo se ha previsto la culminación de 20 este año.
Deivy Pérez Martín, primera secretaria del Comité provincial del Partido, llamó a mantener presente la Tarea Vida y desde que las condiciones económicas lo permitan continuar las acciones previstas para proteger el medio ambiente y mitigar los efectos del cambio climático.
El Buró Provincial del Partido también pasó revista en su encuentro habitual al desenvolvimiento actual de las nuevas formas de gestión económica, que han avanzado en el territorio, pero por su importancia aún se encuentran lejos de tributar lo que la economía necesita.
La máxima dirección política de Sancti Spíritus insistió en la importancia de la relación de estas nuevas estructuras con las empresas estatales, y en la necesidad de potenciar el acercamiento de la Universidad del territorio a estos actores económicos.
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