¿Cuál sería una posible estrategia para tratar la enfermedad de Alzheimer?

Científicos de la Universidad de Illinois, Chicago, Estados Unidos, realizaron un estudio, el cual sugiere que potenciar la producción de neuronas podría ser una estrategia viable para tratar a los pacientes con la enfermedad de Alzheimer.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la enfermedad de Alzheimer es la forma más común de demencia entre las personas mayores.

Los expertos de la OMS subrayan, también, que la demencia constituye  un síndrome que implica el deterioro de la memoria, el intelecto, el comportamiento y la capacidad para realizar actividades de la vida diaria.

Interesados en el estudio de esta afección, extendida por el planeta, los investigadores de la Universidad de Illinois incrementaron el número de nuevas neuronas en ratones con esta dolencia para solventar los fallos de memoria de los animales.

Una nota difundida por Prensa Latina indica que las nuevas neuronas se producen a partir de células madre neurales, mediante un proceso conocido como neurogénesis.

Los investigadores potenciaron la neurogénesis en ratones con la enfermedad de Alzheimer, al aumentar genéticamente la supervivencia de las células madre neuronales, además de suprimir un gen denominado Bax, el cual desempeña un papel importante en la muerte de las células madre neuronales.

Tal proceder condujo a la maduración de más neuronas nuevas, y se restauró el rendimiento de los animales; al final, se lograron el reconocimiento espacial y la memoria contextual de estos.

La indagación corroboró que las deficiencias en la neurogénesis del hipocampo juega un papel en los déficits de memoria asociados a la referida dolencia, al disminuir la disponibilidad de neuronas inmaduras para la formación de la memoria.

En consecuencia, los científicos sugieren aumentar la neurogénesis como valor terapéutico en los pacientes con esta enfermedad.

Por otra parte, los especialistas de la OMS sostienen que la demencia es una de las principales causas de discapacidad y dependencia entre las personas mayores en el mundo entero.

También apuntan que es un síndrome, generalmente de naturaleza crónica o progresiva, caracterizado por el deterioro de la función cognitiva, es decir, la capacidad para procesar el pensamiento, más allá de lo que podría considerarse una consecuencia del envejecimiento normal.

Particularmente, la demencia afecta la memoria, el pensamiento, la orientación, la comprensión, el cálculo, la capacidad de aprendizaje, el lenguaje y el juicio, afirman, igualmente, los especialistas del organismo mundial.

(Con información PL y la OMS)