Los desfiles comenzaron casi al unísono en La Habana y las cabeceras de todas las provincias a partir de las 07:00 hora local, con la participación de colectivos de empresas estatales y de las emergentes entidades cooperativas y entidades privadas, estudiantes de todas las enseñanzas, artistas, intelectuales y familias completas.
En La Habana, la compacta marcha por la emblemática Plaza de la Revolución se prolongó por más de hora y media, ante la presencia del general de Ejército Raúl Castro y Miguel Díaz-Canel, primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y presidente de la República.
Previo al inicio del desfile en eta capital, en un breve discurso, Ulises Guilarte de Nacimiento, secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), señaló que esta jornada es un claro reflejo de la unidad y el compromiso de los cubanos de construir el modelo socialista de desarrollo.
Asimismo denunció los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos contra Cuba, lo cual –puntualizó- influye en el desabastecimiento y la inflación, que repercuten los salarios y en insatisfacciones que los enemigos de la isla pretenden usar para crear divisiones dentro del país.
Pero aseguro que “Cuba vive y trabaja desde la resistencia creativa”, (concepto este último expuesto por el presidente Miguel Díaz-Canel) sobre la necesidad de enfrentar las adversidades y al mismo tiempo avanzar en el desarrollo con iniciativa, inteligencia y buscando soluciones a los problemas.
En Santiago de Cuba, en el extremo oriental y segunda ciudad en importancia del país, Salvador Valdés Mesa, miembro del Buró Político y Vicepresidente de la República, presidió el desfile de más de 320 mil santiagueros y sus familiares, en la Plaza de la Revolución Mayor General Antonio Maceo.
René Berenguer, secretario general de la CTC en la provincia, expuso que la defensa del futuro depende del compromiso y la disciplina en cada puesto laboral, y llamó a fortalecer la empresa estatal socialista mediante el encadenamiento de los actores económicos y la transformación comunitaria.
Destacó el aporte de los trabajadores a la producción de alimentos, una de las prioridades del momento, y significó la importancia de la unidad del pueblo en defensa de la Revolución y sus conquistas.
Mientras, en la ciudad de Santa Clara, en el centro de la isla, la marcha de decenas de miles de personas tuvo como escenario el memorial que guarda los restos del guerrillero argentino cubano Ernesto Che Guevara y sus compañeros de la guerrilla boliviana, un lugar cargado de simbolismo para los revolucionarios de todo el planeta.
En la oriental ciudad de Camagüey, al igual que en el resto de las manifestaciones, sobresalió el reconocimiento a la labor científica y del personal de la salud para el enfrentamiento de la pandemia de Covid19 y el apoyo al proceso socialista de Cuba y a la Revolución.
En declaraciones a Prensa Latina, Julián León, secretario de la Central de la CTC en la provincia de Camagüey, aseguró que más de 400 mil personas en toda la región se han unido en este colofón de la celebración, cuyos preparativos se fueron gestando desde marzo.
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