En medio de las restricciones financieras del país, sustituir la importación de alimentos con producciones internas para abastecer la industria turística en todas sus modalidades de ofertas se vuelve un apremio inaplazable, encomienda que recae sobre la Unidad Empresarial de Base (UEB) Frutas Selectas Sancti Spíritus, responsabilizada con la mayor parte de ese abastecimiento.
Por ser una de las vías principales del país para captar divisas, se impone la necesidad de cubrir ese encargo y descansar cada vez más en la producción nacional —aun cuando sea chocante con el inestable mercado popular—, porque resulta antieconómico comprar surtidos en el exterior que se pueden cosechar con calidad en tierras cubanas.
Clemente Hernández Rojas, director de la entidad, detalló Escambray que de cara a la mejor ocupación que avizora el sector del Turismo en la temporada alta que recién comienza, la empresa desde su estructura nacional y UEB territoriales balancea los surtidos para todos los mercados turísticos del país y alista su soporte de comercialización a fin de responder a la demanda en la provincia y demás polos cubanos.
Precisó que particularmente a Sancti Spíritus le corresponde tributar productos típicos como la cebolla. “Tenemos contratada con productores del territorio la demanda del turismo en el país para tres meses, alrededor de 320 toneladas del bulbo, a razón de 220 toneladas por Frutas Selectas y el resto a comercializar por la Empresa Agropecuaria Banao”, acotó Hernández Rojas.
Como principal entidad surtidora del mercado turístico —también participan otras empresas de la rama agropecuaria y productores individuales del territorio—, la UEB espirituana incorpora a su encargo comercial otros renglones típicos de la agricultura local como el tomate, el plátano vianda y la malanga.
“En este esquema para abastecer al turismo la UEB asume más del 70 por ciento de la demanda, porque somos la empresa más especializada, con infraestructura de neveras y una miniindustria con mejores tecnologías que elabora actualmente siete renglones, a la vez que hacemos encadenamiento para surtidos específicos como el limón con un productor de Meneses”, rerfirió el directivo.
Para responder a este encargo estatal Frutas Selectas ha modernizado en los últimos años su infraestructura con el montaje de una moderna línea de procesamiento de frutas y vegetales, la ampliación de capacidades en la fábrica Yayabo —miniindustria—, el incremento de las capacidades de congelación hasta 40 toneladas y la creación de la sala de beneficio de productos agrícolas. Al mismo tiempo, la entidad trabaja hoy con 18 productores especializados de toda la provincia y más adelante deben llegar a 30.
“Por la situación del país —destacó Hernández Rojas— hoy no se autoriza al Turismo a importar alimentos que se pueden producir aquí; si no somos capaces de cosecharlos no los van a tener, ese el reto que tiene la Agricultura y Frutas Selectas”.
Que en el proceso no desatiendan al pueblo.