Un verdadero quebradero de cabeza enfrentan este martes los basquetbolistas espirituanos: revertir el rumbo de la final de la Liga Superior de Baloncesto, que pierden 0-2 vs. Ciego de Ávila.
Los muchachos de Michel Díaz saldrán esta tarde al tabloncillo de la sala avileña Giraldo Córdova Cardín a lo que puede ser su última opción de seguir con vida en la finalísima, que vive hoy su tercer juego.
Lograrlo parece una tarea casi imposible. Pese al excelente desempeño de los yayaberos en toda la temporada, incluida su gran actuación en las semifinales que ganaron 3-1 frente a Capitalinos, Ciego de Ávila es archifavorito para llevarse su décimo título en estas lides con una escuadra superior.
Los bien llamados Guerreros llegan a este partido tras perder los dos primeros pleitos, el primero 71-62 y sobre todo el segundo, que terminó con pizarra de 72-73 con un tono dramático y polémico y una protesta del equipo local.
A falta de tres segundos, los espirituanos, que habían llegado a ese límite tras borrar una diferencia de 12 puntos luego de un gran repunte avileño en el tercero de 22-13, iban detrás por un punto cuando se produjo una canasta de Daniel García, que no fue considerada como tal por casi coincidir con el pitazo final, una decisión sobre la que se produjeron discordancias por parte de los actuantes.
Mientras los auxiliares que llevan el reloj manifestaron que estaba en tiempo, el comisario técnico David Paumier consideró no válida la canasta, ya que, según él, ocurrió con el tiempo agotado.
Pero la protesta espirituana no prosperó y hoy el equipo se juega el todo por el todo con todas las canastas en contra. Para aspirar a lo increíble deben doblegar en su casa a los favoritos avileños en los tres juegos que restan.
Demandan una proeza mayor a la que ya protagonizan al incluirse por primera vez en una final de Liga Superior. Además de intentar borrar el efecto psicológico del último partido, precisan de un mayor accionar de quien es su bujía inspiradora: Mario Luis Troyano, quien ha marcado 24 puntos en los dos primeros encuentros, a razón de 12 en cada uno, cuando su rendimiento en los dos partidos finales de la fase semifinal ante Capitalinos fue espectacular al marcar 22 y 33, respectivamente.
La final femenina, que marcha con empate a una victoria por bando entre Guantánamo y Santiago de Cuba, se reanuda este martes en la sala Rafael Castiello, de la más oriental de las provincias cubanas.
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