Los retos de la era digital, el diálogo con las audiencias y la necesidad de convertirse en plataforma para la participación ciudadana son desafíos para la radio y la televisión en Cuba, resaltaron este miércoles profesionales de estos medios.
En el balance de trabajo correspondiente al año 2021 del Instituto Cubano de Radio y Televisión (ICRT) que presidió el primer ministro, Manuel Marrero, los análisis estuvieron centrados, también, en la articulación con otros organismos y la convergencia tecnológica, señaló un reporte de la televisión local.
El jefe de Gobierno instó a fortalecer la comunicación social en el país, así como la red de telecentros y emisoras distribuidos en el territorio nacional, a la vez que llamó a ser críticos con la realidad y no esconder las insuficiencias.
De igual manera, Marrero elogió la labor realizada por los medios y sus profesionales durante la pandemia de la Covid-19 y abordó la estrategia económica y social de la nación, en un contexto de impacto del bloqueo económico, comercial y financiero por parte del gobierno de los Estados Unidos.
Motivó el debate de los participantes la acogida por la población de la serie Calendario, dirigida por la realizadora Magda González.
A propósito, trascendió en el encuentro que actualmente se trabaja en dos nuevas producciones, en colaboración con el Ministerio de las Comunicaciones y el de Salud Pública de la isla.
El jefe del departamento ideológico del Comité Central del Partido Comunista, Rogelio Polanco, hizo referencia a las prioridades del organismo e instó a una mayor integración entre todas las instituciones “en función de la imagen y el sonido dentro de Cuba y para el mundo”.
El ICRT surge el 24 de mayo de 1962 con el nombre de Instituto Cubano de Radiodifusión -en 1975 cambió su nombre por el actual- con la misión de ofrecer una programación con altos valores al servicio de la cultura y en función de los interés, necesidades y deseos del público al que va dirigida.
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