Cuba iniciará el nuevo curso de Educación Superior el próximo 18 de abril con un rescate del sistema presencial que permita la formación integral del estudiante, afirmaron este martes fuentes oficiales.
El ministro de Educación Superior, José Ramón Saborido, enfatizó que el calendario docente en 2022 contará con 35 semanas lectivas, lo cual permitirá un ajuste curricular para que los alumnos asistan a las aulas.
Durante el espacio televisivo de la Mesa Redonda, el titular recordó que en 2021 el sector logró finalizar todos los cursos y realizó un salto vertiginoso en la informatización de los procesos pese a la crisis económica y epidemiológica.
En este sentido, Saborido destacó el espíritu innovador de la Academia, la autonomía alcanzada durante el año pasado, así como la respuesta que dio la Universidad a las demandas sociales del país.
El ministro refirió el reto de apoyar al municipio en la formación de sus recursos humanos para que ellos puedan implementar sus estrategias de desarrollo local.
Por su parte, Reynaldo Velázquez, director general de Formación de Pregrado del Ministerio, aseguró que en 2022 se otorgaron 100 mil 22 plazas, lo cual constituye un aumento respecto a otros cursos.
«Creo que debemos potenciar más el curso a distancia y el desarrollo de las plataformas virtuales», agregó.
Según el directivo, en estos momentos se realiza la última etapa de los otorgamientos de carreras.
De acuerdo con la información oficial, del 28 de julio al 5 de septiembre y del 26 de diciembre al 2 de enero los estudiantes disfrutarán de vacaciones (de verano y de fin de año, respectivamente).
En febrero próximo iniciará el curso académico 2023, el cual coincidirá con el año fiscal.
Los directivos reiteraron que la Universidad priorizará este año el otorgamiento de estudios a jóvenes vulnerables y continuará el apoyo de transformación en las comunidades que lleva a cabo el Gobierno.
Recientemente el presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, enfatizó que mientras el bloqueo de Estados Unidos y la covid19 afectaron de forma negativa a la producción de bienes y servicios, la Educación Superior por otro lado avanzó.
El mandatario reconoció la capacidad creativa para concluir el curso académico, así como las potencialidades de la enseñanza a distancia.
Además, el gobernante subrayó el aporte de los académicos en la creación de políticas públicas y legislativas.
En este sentido, abogó por una mayor presencia de expertos del sector en las provincias.
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