En cuclillas y escondidos entre la maleza se hallan dos jóvenes de apenas 16 años de edad que esperan por la más mínima distracción de los custodios. Aguardan agazapados detrás de la cerca perimetral de la Escuela Elemental de Arte Ernesto Lecuona, de Sancti Spíritus, hasta que llega el apagón al filo de las 12 de la noche y se sienten con el coraje suficiente para privar a más de 40 niños de su televisor.
“Unos minutos después de las 11:55 .p.m, cuando la corriente se va, los custodios comienzan a hacer su ronda por la escuela y se percatan de que ya no está el televisor de la salita de estar, que es el único que tienen aquí los estudiantes internos para ver sus programas”, dice a Escambray Lellisky Sosa León, directora del centro.
Duele saber que uno de los presuntos autores del hecho fue estudiante de esa propia escuela, lo cual facilitó la comisión del delito.
Una vez sustraído el televisor pantalla plana de 32 pulgadas y amparados nuevamente por la oscuridad, se dirigieron hasta su lugar de residencia ubicado en el Reparto Escribano de la ciudad cabecera, con la intención de vender el equipo lo más rápido posible.
De acuerdo con el mayor Yester Reyes Marrero, especialista de la jefatura provincial del sistema de la Policía Nacional Revolucionaria (PNR), el hecho ocurrió el pasado 7 de septiembre y se esclareció cuatro días después.
“Los dos jóvenes tienen antecedentes penales y, de ellos, el que fue estudiante de esta escuela facilitó la entrada por la parte trasera, violando la cerca perimetral. Luego trataron de vender el televisor en Kilo-12, pero a través de la información brindada por el propio pueblo y del trabajo policial y el trabajo secreto operativo, se les dio captura a los ciudadanos y se recuperó el televisor”, explicó.
Otro hecho de robo, asociado a una moto modelo ETZ 250, perteneciente a la Dirección Provincial de los Joven Club en Sancti Spíritus, ocurrió también en este mes y fue rápidamente esclarecido por los especialistas del Ministerio del Interior.
Cuenta Carlos Vicente Hernández Valdivia, subdirector económico de la entidad y responsable de la motocicleta, que el 3 de septiembre, a plena de luz del día, parqueó en la calle Sobral y entró tan solo cinco minutos al mencionado centro de trabajo, pero al salir “Carburo” brillaba por su ausencia.
“Entonces me subió una cosa pa’ arriba que no te puedo explicar. A la moto todos los trabajadores de aquí le decimos Carburo en alusión a los muñequitos cubanos, porque es la que usamos para las gestiones. La dejo en el mismo lugar desde hace 15 años y mira, me la robaron en cinco minutos”, añade.
El presunto autor del robo, también con antecedentes penales, es reincidente en este tipo de delitos y trasladó la moto hasta Yaguajay, donde “cuadró” conducirla hasta la provincia de Ciego de Ávila para, una vez allí, desarmarla en piezas para su posterior venta en el mercado negro.
Según el especialista de la jefatura provincial del sistema de la PNR, el trabajo operativo comenzó casi de inmediato, se detuvo al ciudadano y este confesó el delito.
Al cierre de la información, tanto el televisor de 32 pulgadas como la moto ETZ 250 fueron devueltas a las entidades estatales.
Hasta q el Còdigo Penal no sea màs riguroso con esos ladrones, no van a disminuir esos delitos. Ahora le imponen una sanciòn de 5 años. Por el buen comportamiento cumplen tres años. Y al otro dia comienzan a robar otra vez. Q cumpla 30 años a todo el q robe, a ver si no van a disminuir estos delitos.