Actualmente muchas personas solicitan la jubilación con el propósito de volver a recontratarse para aumentar sus ingresos y así enfrentar el alto costo de la vida hoy. Pero, en no pocos casos, esa decisión también se relaciona con el propósito de aportar sus saberes y experiencias en un contexto marcado por el envejecimiento poblacional y la falta de fuerza joven.
Sin embargo, no todos los jubilados interesados en recontratarse encuentran puestos disponibles, entonces, ¿pueden o no pueden recontratarse los jubilados en Sancti Spíritus?, ¿qué se establece legalmente al respecto? Escambray buscó respuestas con José Adriano Abreu, director de la filial provincial del Instituto Nacional de Seguridad Social.
“La entidad laboral no está obligada a recontratar a la persona que se jubila, esto funciona como un acuerdo entre las partes, depende de si la necesita o no. Es una decisión empresarial. No en todas partes quieren volver a contratar a los mismos trabajadores, pero los jubilados pueden ser empleados en sus mismas entidades o en otros lugares donde se gestionen un empleo y allí también pueden aportar sus conocimientos y experiencias”, opinó.
Pero, no aceptar de vuelta a los jubilados parece un poco contradictorio de cara al envejecimiento poblacional que ya vive el territorio: “En mayo del 2020 se aprobó una legislación que da libertad a las empresas para contratar a los jubilados, eso es a criterio del Consejo de Dirección de cada empresa, que valora si lo necesita o no porque también hay jóvenes esperando por esos puestos de trabajo que los jubilados dejan”, agregó el directivo.
Y ejemplificó con la Dirección Provincial de Educación, que pidió retirar a los trabajadores que llegaban al límite de edad porque ya contaba con la fuerza disponible de los maestros nuevos que se acabaron de formar.
Además, puntualizó, es bueno recordar que no es obligado jubilarse, las personas se retiran cuando lo deciden y, si lo desean, después de la edad establecida —60 años en la mujer y 65 en los hombres—, pueden seguir trabajando por más tiempo en sus puestos de labor habituales.
Sería bueno revisar los pagos a los que estaban jubilados cuando comenzó el reordenamiento, esas chequeras resultan un suficientes actualmente y muy por debajo de las que se otorgan actualmente con solo un año de trabajo después del aumento y al reincorporado le mantienen el incremento del 2%, algo insignificante en el nuevo contexto, creo profundamente en la justeza del sistema y creo presten atención a este asunto.
Nuestras leyes cada vez más se ajustan a nuestras realidades. Este es el caso ahora de la vejez. Pero la lucha mayor debe ser ahora y como en otras situaciones en el combate porque en la realidad se cumpla lo legislado. Se dice que tenemos casi 2 millones 400 mil personas con 60 años y más y dentro de pocos años serán más. Cuantos de ellos aún estarán laborando?, porque la jubilación es a los 65 años para hombres y 60 para mujeres. Debe ser una buena cifra, con fuerte incidencia aún en toda la vida del país y con toda la influencia cultural y politico- ideológica de este segmento de población, sin dudas muy comprometido con la revolución. Sabe lo que está pasando hoy en los centros de trabajo? Bueno pues cuando ya estás por encima de 45 años ya no tienes derechos a ser Cuadro y es muy probable que tampoco se piense en nada de direccion. Política de hace un tiempo para acá en el MINTUR. Los que hoy están en los cargos con varios años ya se les tocó campana como se dice. Sabe cuánto se pierde en conocimientos, experiencias, capacidad, necesarias para la dirección a esa edad por la decisión tomada? Muchas administraciones más jóvenes en vez de aprovechar esas capacidades y trabajar en lo que se llama transmisión de experiencias se atrincheran y construyen una división imaginaria basada en la famosa sombra de Antolín «El Pichón». Esa es una discriminación innecesaria para alguien que ya va hacia atrás. La necesidad de poner jóvenes en cargos como parte de la continuidad, no tiene porqué apresurar a los jóvenes ni atropellar a los viejos. Cada error quema vidas y cuesta millones. Es como si estuviéramos desmontando algo. Recuerdo que en mi formación nunca hubo apuros. Insisto en esto porque considero es determinante hoy para poder avanzar, aprovechar mejor los recursos humanos y materias primas, no chocar de nuevo con la misma piedra, y tantas otras cosas que necesita la economía del país para su restablecimiento. La nación es como una gran empresa donde son necesarios la tecnología, la organización laboral, las materias primas pero más que todo la calidad de la preparación de la fuerza laboral que es igual a gente preparada, con experiencias y habilidades. Siempre hemos dicho por lo anterior, que lo mejor que tenemos es nuestra gente, esa que hoy está en sus 2/3 partes de la vida laboral. Utilicemosla al máximo en lo que queda y hagamos realidad lo que para ellos la ley ha preparado.
Siempre es bueno saber que los jubilados pueden reincorporarse al trabajo, pero lo cierto es que debemos darle más oportunidades a los jóvenes, que con el tiempo pueden tener la misma o mas experiencia que los primeros. Además, tener una fuerza laboral joven, garantiza la estabilidad y el desarrollo a mediano plazo de las entidades, especialmente las universidades y centros educativos, que necesitan de un claustro que les garantice su desarrollo a futuro, atendiendo a estándares internacionales. Muchas gracias